Etiqueta: #30dias30bibliotecas

  • Día 15: Biblioteca virtual del Instituto Nacional para Ciegos – INCI #30dias30bibliotecas

    Esta publicación hace parte del reto 30 días, 30 bibliotecas.

    La ubicación

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    La visita

    Sobre una concurrida y estrecha avenida de Bogotá se encuentra el Instituto Nacional para Ciegos – INCI. Pasé por esta biblioteca para conocer un poco más de su labor y conocer su biblioteca.

    Al ser una biblioteca virtual debes ir a Internet para consultarla. Sin embargo pude ver algunos documentos físicos en braille y ayudas, como el identificador de billetes, las leyes y decretos en braille y algunos libros infantiles.

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  • Día 14: Biblioteca Metropolitana de Columbus, Ohio #30dias30bibliotecas

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    La ubicación

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    La visita

    En el marco del Congreso Mundial de IFLA de 2016, tuvimos la oportunidad de visitar la Biblioteca Metropolitana de Columbus, en Ohio (Estados Unidos). Una biblioteca enorme, llena de luz y mucho espacio para pasar el tiempo.  Creo que lo que más me gustó de la biblioteca fue la inscripción de la entrada:

    "Open to all" (Abierta a todos): Biblioteca Metropolitana de Columbus, Ohio
    «Open to all» (Abierta a todos): Biblioteca Metropolitana de Columbus, Ohio

    ¿Cuál es el espíritu que impulsa a la creación y el sustento de una biblioteca? ¿Ser bibliotecario es sólo algo que se hace para ganar el dinero para sobrevivir o debe haber algo más detrás de esta profesión?

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  • Día 13: Biblioteca de la Universidad de La Salle sede Chapinero #30dias30bibliotecas

    Esta publicación hace parte del reto 30 días, 30 bibliotecas.

    La ubicación

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    La visita

    Fui a esta biblioteca para seguir en mi recorrido por las bibliotecas universitarias de Bogotá. Fui a esta biblioteca durante las vacaciones de los estudiantes, por lo que estaba bastante sola y tranquila.

    Algo que me resulto bastante interesante de esta biblioteca es que tiene dos sistemas de repositorios para almacenar los trabajos de grado producidos por los estudiantes en DSpace: Uno público en Internet y otro que solamente se consulta en sala, para los trabajos que por derecho de autor no pueden publicarse en internet.

    Un poco de contexto

    En esta sede se almacenan otros recursos que también pueden encontrarse en la sede Candelaria del mismo sistema de bibliotecas. En cada una de estas sedes de la universidad, hay diferentes facultades, por lo que también sus colecciones se especializan en las temáticas que las facultades trabajan.

    En esta sede de la universidad se encuentra la facultad de optometría,  por lo que los trabajos que está adelantándose desde el área de servicios de la biblioteca en cuanto a accesibilidad pueden resultar bastante interesantes. Es una oportunidad única para que una biblioteca pueda avanzar en estos temas de la mano de profesionales y estudiantes de optometría.

    Los alrededores de la biblioteca

    La biblioteca queda en Chapinero alto, muy cerca de la carrera séptima y el Parque de los Hippies. La universidad tiene a sus alrededores bastantes cafés y restaurantes.  La capilla de la Universidad de La Salle es un punto bastante imponente en el panorama bogotano.

    Las fotos

  • Día 11: Biblioteca ICANH #30dias30bibliotecas

    Esta publicación hace parte del reto 30 días, 30 bibliotecas.

    La ubicación

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    Esta bibliotca se encuentra en el barrio de La Candelaria en Bogotá.

    La visita

    Conocí la existencia de esta biblioteca luego de salir de una obra en el Teatro de La Candelaria. En ese momento estaban remodelando la casa del instituto y justo en la fachada del frente vi una pequeña placa que decía «Biblioteca ICANH». En ese momento era estudiante de bibliotecología y me llamó la atención la temática del instituto: antropología e historia.

    Uno o dos años más adelante apliqué a una convocatoria e ingresé como bibliotecario del instituto. De eso ya han pasado varios años y volver a entrar a esta biblioteca fue una nueva experiencia.

    Para empezar, la sala de consulta fue remodelada hace poco, el espacio en el que había trabajado, actualmente, no tiene ni rastro de lo que había conocido. Esto me alegró bastante. Esta adecuación de espacios mejora las condiciones, tanto del personal de la biblioteca, como del público que la frecuenta.

    En la visita, aproveché para volver a leer unos fragmentos del libro Viaje a pie, de Fernando González, que sabía que allí iba a estar. La colección de la biblioteca es cerrada. La bibliotecaria luego de ayudarme con la solicitud del libro se dirigió a una ventanilla fuera de la sala de consulta en donde otra persona buscó entre los estantes e hizo el registro del préstamo. Luego de leer un poco, me acerqué una vez más a la bibliotecaria y le pregunté por la remodelación y los servicios de la biblioteca.

    En la segunda mitad del 2013 la biblioteca cerró al público externo para adecuar las instalaciones de la sala de consulta, la oficina de correspondencia, la sección del servicio y la adecuación de una precaria cocina en una oficina, en donde actualmente se encuentra la persona encargada de la biblioteca.

    Sobre los servicios bibliotecarios, la biblioteca presta sus servicios principalmente en las instalaciones de la biblioteca, los prestamos externos se hacen por medio de convenio interinstitucional. Hay servicio de fotocopiadora, equipos de computo en la sala de lectura y lector de microfilm. No ha redes inalámbricas habilitadas.

    Sobre las colecciones, la biblioteca cuenta un centro de documentación con los informes de investigación del instituto en temas como arqueología, etnología, sociología, historia, y estudios que se puedan desprender de estas categorías. La colección general se compone de libros relacionados con los temas de interés del instituto y una sección que poco a poco se ha ido difuminando, relacionada con literatura hispánica. También poseen el archivo en microfilm de documentos del archivo de indias y copias de actas de nacimiento, bautismo, matrimonios y defunciones de los archivos de las parroquias más antiguas de Bogotá. Una pequeña colección de mapas, planos y dibujos, éstos de sitios y artefactos arqueológicos; y material audiovisual (cassetes de vídeo, audio, cintas de carrete abierto y CD), desafortunadamente, algunos de estos materiales no se pueden consultar por falta de un equipo que facilite su lectura. También hay registro de incunables y libros publicados entre los siglos XVIII y XIX.

    Un poco de contexto

    La sede actual de la biblioteca pertenecía al Instituto Colombiano de Cultura Hispánica, institución creada en 1951. Este instituto tenía como objetivo de divulgar la herencia Española en Colombia. En la casa se encontraba la Biblioteca Miguel de Cervantes Saavedra, en ella se mantenía el depósito de libros en el primer piso, tal cual existe hoy en día, y tenía destinados los niveles superiores como una sala de consulta. Los libros eran transportados por un ascensor desde el deposito hasta el tercer piso según los requerimientos de sus visitantes.

    En la entrada de la casa, en ese entonces, existía un patio con un busto de Miguel de Cervantes, el cual daba la bienvenida a la biblioteca. Esto desapareció cuando en 1999 fue fusionado con el Instituto Colombiano de Antropología, dando origen al actual Instituto Colombiano de Antropología e Historia (ICANH).

    Por otra parte, el Instituto Colombiano de Antrpología tiene sus orígenes de una fusión previa. En 1938 se crea el Servicio Arqueológico Nacional y en 1941 es creado el Instituto Etnológico, que para 1952 se unen formando el Instituto Colombiano de Antropología, institución dependiente del Ministerio de Educación, en un primer momento, y a partir de 1968 pasa a ser parte del Instituto Colombiano de Cultura (Colcultura) hasta 1999.

    La biblioteca de este instituto recorrió varias instalaciones antes de llegar a su actual recinto. Desde establecimientos en Teusaquillo y La Candelaria, hasta el espacio que hoy ocupa el Restaurante El Panóptico, en el Museo Nacional de Colombia.

    El origen y las transformaciones que tuvieron cada una de las instituciones que conforman al ICANH en la actualidad tienen una historia propia, que está en gran parte documentada en las colecciones de la biblioteca.

    Los alrededores de la biblioteca

    Sobre la misma calle y una casa junto a la Sede principal del Instituto se encuentra el Teatro La Candelaria.

    Una cuadra al oriente, sobre la calle 2, se encuentra la casa en donde nació José María Vargas Vila, y al norte por la misma calle, a una cuadra de distancia, se encuentra la plazoleta del Chorro de Quevedo.

    Hacia el occidente se encuentra el camino que lleva a la Biblioteca Luis Ángel Arango.

    Sobre la carrera 3 y dos cuadras hacia el norte, existe, todavía, una panadería y pastelería llamada Mi vieja Suiza. Aunque en los alrededores hay una oferta variada de cafeterías y restaurantes, ésta no puede pasar desapercibida.

    Las fotos

  • Día 10: Biblioteca pública Manuel María Aya Díaz #30dias30bibliotecas

    Esta publicación hace parte del reto 30 días, 30 bibliotecas. En esta ocasión dimos un salto a un municipio cercano a la capital del país: Fusagasugá.

    La ubicación

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    Fusagasugá está ubicada a 56 kilómetros al sur occidente de Bogotá. es la ciudad capital de la provincia del Sumapaz, en el departamento de Cundinamarca.

    La visita

    La visita fue mas que merecida. Esta biblioteca municipal la conocí y visite por primera vez a finales del siglo XX. En ese momento vivía en este municipio y era una fuente de información para resolver las tareas de mis clases de bachillerato. Unos años después me mude a Bogotá y nunca mas volví a pisar esta biblioteca. Por una vista ocasional a la ciudad, y aprovechando el motivo de estas publicaciones, resolví volver a consultar esta biblioteca y contrastar esta experiencia con mis recuerdos.

    Poco antes de llegar, durante el día de la visita, estuve rememorando la ultima vez que estuve consultando libros. Recordaba que la biblioteca se ubicaba en un segundo piso, en una construcción ubicada junto a la casa de la cultura de Fusagasugá. La consulta, en ese entonces, se hacia a través de la bibliotecaria, una señora mayor y amable; la colección era cerrada y con un turno se entregaban los libros. Creo que lo último que consulte fue un atlas.

    Cuando llegue a la casa de la cultura vi varios cambios, así que pregunte si la biblioteca todavía funcionaba en ese lugar. Cuando llegue al edificio note que la vía de acceso había cambiado. La biblioteca seguía en el segundo piso. Antes de llegar a las escaleras se encontraba un punto de Vive Digital. Al subir las escaleras fue muy evidente el cambio de la biblioteca, mis recuerdos no coincidían para nada con lo que estaba viendo.

    Entrada de la biblioteca municipal
    Entrada de la biblioteca municipal.

    La primera impresión de la visita fue muy buena, espacios amplios, colección abierta, un lugar para exposiciones, sala de lectura, de computo y un pequeño auditorio en donde estaban presentando un película infantil. Me acerque al lugar en donde se encontraba el bibliotecario, Mauricio, nos saludamos y luego me pregunto si podía ayudarme en algo, si era mi primera vez en la biblioteca. Le dije que estaba de visita y que mi ultima visita fue hace 16 años, algo le causo gracia y se acerco. Me pidió diligencia un formulario, un registro de visita. Cuando termine, me hizo un recorrido por el lugar.

    Mauricio se tomo su tiempo para explicarme la distribución de la biblioteca, donde estaban localizadas las distintas áreas del conocimiento y la sección de literatura, las mesas de lectura, el auditorio y una breve indicación de los servicios que prestan, particularmente los relacionados con el préstamo y el uso de computadores. También menciono servicios adicionales como talleres de lectura y escritura.

    Mientas me mostraba el espacio de lectura, vimos a un niño atrincherado junto a un ventanal, con sus cuadernos, mochila y algunos comestibles hablando por celular, lamentándose porque estaban presentando una de sus películas favoritas, y el ahí haciendo tareas. Cuando termino su llamada siguió concentrado en lo que estaba haciendo.

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    Foto: Leonardo Ramírez Ordóñez

    Luego de esta presentación Mauricio siguió hacia su escritorio y me dejo en libertad de explorar los libros que quisiera, recomendando dejar los libros sobre la mesa después de consultarlos, para que él o una de las personas que se encontraba prestando su servicio social en el lugar los ubicara en el orden correcto.

    Recorriendo los estantes por mi cuenta pude ver que la colección de literatura tenia los ejemplares mas antiguos, algunas ediciones que nunca había visto de autores colombianos y un buen numero de novela gráfica. También un espacio dedicado a la literatura infantil muy llamativo, por cierto. Junto a los libros de literatura infantil encontré una espacio de exposición. La muestra estaba compuesta por fotografías y textos. La primera imagen que llamo mi atención fue la de una persona en un ambiente de discoteca, algún recuerdo llego a mi y al ver los textos note que esa y todas las demás historias trataban mitos y leyendas de Fusagasugá, historias que nos contábamos con otros compañeros de colegio para asustarnos.

    La muestra hacia parte de un taller de fotografía y estaba basado en un par de publicaciones de hace unos años en donde se recopilaron y publicaron estas historias en el marco de un proyecto de recuperación de memoria oral de la región.

    Un poco de contexto

    La biblioteca esta ubicada en un sector de la ciudad aledaño a varios colegios de la ciudad. Lleva el nombre el ciudadano Manuel María Aya Díaz descendiente de la familia Aya, reconocida desde tiempos coloniales en la región. Manuel Aya Díaz paso sus últimos días en París, al morir destino su herencia a la construcción de una fundación educativa que lleva su nombre y su biblioteca.

    Según el Sistema Nacional de Información Cultural (SINIC), fue constituida en 1992. Es una biblioteca publica municipal y esta vinculada a la Red Nacional de Bibliotecas Publicas.

    Sobre el origen de la biblioteca publica de la región, se dice que Jorge Tadeo Lozano, dueño de la hacienda Chinauta, en donde frecuentaron científicos como Mutis, Humboldt y Caldas y otras personalidades de la época. Esto pudo haber sido un motivo que el fundara la primer biblioteca publica en la casona conocida, actualmente, como el Viejo palacio municipal.

    Los alrededores de la biblioteca

    En los alrededores inmediatos se encuentra la quinta La Tulipana, edificación republicana construida en el siglo XX, es sede de la actividad cultural del municipio. En el mismo terreno hay una sede del SENA y una amplia zona verde.

    En los alrededores inmediatos se encuentran las sedes del colegio Carlos Lozano y Lozano, que van desde el jardín infantil, la escuela básica primaria y bachillerato. En las mismas instalaciones funciona una sede de la Universidad INCCA. En la misma manzana se encuentra el colegio Fundación Manuel Aya y frente a este colegio una frutería excelente.

    Las fotos

  • Día 9: Biblioteca Luis Ángel Arango #30dias30bibliotecas

    Esta publicación hace parte del reto 30 días, 30 bibliotecas.

    La ubicación

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    La visita

    En esta biblioteca me hice lector. Recuerdo que solía venir todos los lunes en la mañana a dejar un libro y sacar uno nuevo para devolverlo el siguiente lunes en la mañana.

    Algo que me sorprende de esta biblioteca es la impresionante colección que tiene. Es muy probable que no encuentres un libro a la venta, que no lo encuentres en muchas bibliotecas, pero seguro eso que buscas, lo encuentras aquí. Documentos como el de Gregorio Peces-Barba que sirvió como base para mi trabajo de maestría, lo encontré aquí.

    Es muy probable que no encuentres un libro a la venta, que no lo encuentres en muchas bibliotecas, pero seguro eso que buscas, lo encuentras aquí

    Leí casi todos los libros de Charles Bukowski aquí, también los de Efraim Medina Reyes difíciles de conseguir, hace como 12 años. Solía venir al tercer o cuarto piso a leer novelas. Engancharme a estos libros fue lo que me convirtió en lector e incidió en mi formación como bibliotecólogo y profesional de ciencia de la información. Eso se lo debo a esta biblioteca.

    A decir verdad no he ido a los conciertos que ofrece la biblioteca, pero por lo general hay una muy buena oferta cultural. Si he asistido a charlas, conferencias y conversatorios. También he visto varias de las exposiciones que realiza la biblioteca.

    En esta ocasión quise trabajar en uno de los pupitres que se encuentran afuera de las salas de lectura. Tengo una maleta que no quería dejar en los casilleros. Hay una muy buena iluminación y es una biblioteca que no importa a qué hora la visites, siempre hay alguien leyendo.

    Biblioteca Luis Ángel Arango
    Biblioteca Luis Ángel Arango

    Hay bastante gente en la biblioteca y puedes encontrarte de todo. Ya es famosa una señora que suele visitar la biblioteca con papel aluminio en la cabeza, para que no lean su pensamiento. En una visita anterior a esta, recuerdo que subí a un ascensor con Leonardo y un hombre bastante corpulento, quien empezó a insultarme luego de que las puertas se cerraran. Alegaba que debía cortarme el cabello. «Con esa barba y el pelo largo, parece mitad hombre y mitad mujer» me decía. – ¿Por qué debería cortarme el cabello? le pregunté. – ¡Porque yo soy el líder! dijo. Nos bajamos del ascensor y cada uno siguió su camino, él hablando solo.

    «Con esa barba y el pelo largo, parece mitad hombre y mitad mujer» me decía. – ¿Por qué debería cortarme el cabello? le pregunté. – ¡Porque yo soy el líder! dijo.

    Estos usuarios variopintos puede que den una muy buena idea de cómo es Colombia.

    Un poco de contexto

    Esta biblioteca empezó siendo una biblioteca especializada en economía, para los economistas del Banco de la República, entidad a cargo de la biblioteca. Actualmente funciona como biblioteca pública y responde a necesidades de una muy amplia comunidad, que la tiene como referencia por su larga trayectoria en la ciudad.

    Los alrededores de la biblioteca

    La Luis Ángel Arango funciona en la Candelaria, el sector colonial de Bogotá. En frente se encuentra el Museo de la Moneda y la donación de Fernando Botero, donde pueden encontrarse pinturas y esculturas de grandes artistas.

    Por esa misma cuadra hay una gran cantidad de restaurantes, cafés y chocolaterías. Al costado oriental de la biblioteca se encuentra el Colegio Agustiniano de San Nicolás, donde estudié en mis primeros años de escuela.

    Muy cerca queda la Universidad de La Salle y el Teatro Colón. En la calle pueden verse algunos carritos donde venden obleas. Es curioso ver que casi todos los carritos ahora se llaman «Obleas Mick Jagger», luego del concierto de los Rolling Stones en Bogotá, donde Jagger probó las obleas.

    Las fotos

  • Día 8: Biblioteca de la Universidad de La Salle, sede Candelaria #30dias30bibliotecas

    Esta publicación hace parte del reto 30 días, 30 bibliotecas. Hice la visita mientras están en vacaciones en esta universidad, por lo que estaba bastante vacía. Al parecer si no tienes vinculación con la Universidad es más complicado ingresar a esta biblioteca.

    La ubicación

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    La visita

    Estuve averiguando si podía acceder a la biblioteca sin estar vinculado a ella. Al parecer es más fácil acceder a esta biblioteca si estudias y hay una institución que te presente. Para personas sin ningún tipo de vinculación a la universidad podría ser más complicado entrar.

    Estudié en un colegio lasallista. Recuerdo que en las izadas de bandera, el hermano Pedro recordaba El Bogotazo y cómo lo vivió. Siempre nos contaba que la turba incendió primero los pisos superiores del colegio, para ir bajando e incenciando el resto. A decir verdad no sé si el incendio del que hablaba el hermano Pedro se dio en esta sede, sin embargo da cuenta de la tradición que tienen los hermanos de La Salle en Bogotá (y Colombia).

    ¿Cuántos libros se perderían en ese incendio? ¿Cuánta información perdió la biblioteca de la Universidad de La Salle (si es que la perdió) por estos eventos de violencia del país?

    Un poco de contexto

    Esta biblioteca universitaria es vecina del Museo de La Salle. Tiene colecciones patrimoniales (o en proceso de serlo) donadas por hermanos de la comunidad de La Salle.

    Los alrededores de la biblioteca

    La biblioteca se encuentra a unas pocas cuadras de la Biblioteca Luis Ángel Arango, en La Candelaria. Es un sitio bastante turístico al estar en la parte colonial de la ciudad.

    Imagino que al ser estudiante de La Salle hay muy buenas cosas que hacer. Además dicen que en la Candelaria hay fantasmas. Las historias son algo interesante a conocer. Esta biblioteca queda particularmente cerca del Chorro de Quevedo, lugar donde se supone nació Bogotá, con una iglesia y doce chozas alrededor.

    Esta biblioteca queda en una zona universitaria, por lo que fácilmente pueden encontrarse muchas otras bibliotecas universitarias alrededor.

    Las fotos

     

  • Día 6: BECMA, la Biblioteca Especializada en Cine y Medios Audiovisuales de la Cinemateca #30dias30bibliotecas

    Esta publicación hace parte del reto 30 días, 30 bibliotecas.

    La ubicación

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    La visita

    Un poco antes de entrar me topé con tres ex compañeros de trabajo de la Biblioteca Nacional. Lyda, uno de ellos, me comentó que el bibliotecólogo a cargo se llama Juan Carlos. Si no estoy mal, la misma Lyda trabajó en la BECMA.

    Fui a visitar esta biblioteca, de la cual me enteré por las letras doradas de la puerta. Por lo general la puerta está cerrada, lo que te hace dudar de su disponibilidad. Al golpear, le pregunté al celador, quien me preguntó si venía de alguna institución en particular. Esta pregunta se ha hecho frecuente en este reto.

    «No, de ninguna. Soy un simple ciudadano que quiere consultar la biblioteca» es lo que suelo responder. Lo que genera cierta extrañeza. Como también se ha vuelto más o menos rutinario me piden registrar tableta o computadores portátiles que lleve conmigo.

    La biblioteca queda en el sexto piso. En términos de accesibilidad creo que podrían haber problemas. Si quisiera salir con mi abuela (que usa una silla de ruedas y salimos con cierta frecuencia), seis pisos sin ascensor son mucho más de lo que podría subir ella, o cualquiera en una situación donde tus piernas requieran ciertas ayudas.

    Al subir me encontré con un proyector. Eso me emocionó. Le tomé una foto a la parte de atrás, porque la ubicación no ayuda mucho.

    Proyector en las escaleras del BECMA
    Proyector en las escaleras del BECMA
    Más arriba encontré un afiche de La Mencha, que me emocionó mucho más. Ya vas percibiendo el aroma del cine y la televisión de lo que podrías encontrar en esta biblioteca.

    Afiche de La Mencha, en las escaleras para llegar a la biblioteca de la Cinemateca
    Afiche de La Mencha, en las escaleras para llegar a la biblioteca de la Cinemateca
    Al llegar estaba Juan Carlos, detrás de él otra persona y en la mesa un grupo que discutía vehementemente sobre un evento o algo por el estilo. Cuando le comenté que quería conocer sobre la biblioteca, Juan Carlos le pidió a Angélica (la persona tras él) que me la enseñara.

    Hay un grupo de 5 personas trabajando. Hablan sobre soportes, técnica, subjetividades y publicación en blog, revistas… parece una discusión muy interesante. Parecía que estaban preparando la preparación de un evento. Una cátedra en cine o algo así. Pintaba muy bien y el que ellos estuvieran ahí daba cuenta de la apropiación que debe tener la comunidad cineasta y cinéfila del lugar.

    Angélica me comentó que esta biblioteca tiene cerca de 30 años. Se debe no a una persona, sino a un grupo de personas que movían el cine en la capital de Colombia. Ha tenido sus altos y bajos, pero ahora tiene cierta continuidad.

    Ella también me comentó que están haciendo catalogación analítica de las revistas, es decir que describen no sólo la revista como un todo, sino que catalogan cada uno de sus artículos para que pueda recuperarse. Es bastante trabajo para una sola persona, pensé.

    El sitio es bastante chico y se ve saturado por la colección, eso se contrasta con la solicitud de un nuevo espacio para la Cinemateca. Imagino que más espacio les podría venir muy bien, sin embargo es un sitio muy agradable para estar. Tienen películas en diversos formatos y una de las cabinas tiene VHS, mientras que la otra es para discos ópticos (DVDs o CDs).

    Un poco de contexto

    La biblioteca ofrece únicamente consulta en sala. Hay un par de cabinas para 3 personas para poder ver las películas u otros materiales que ofrece la Cinemateca. Tienen una colección de los carteles de las películas, que me pareció muy interesante consultar a fondo más adelante. Siempre me han gustado los afiches de las películas, sobre todo porque antes eran dibujantes quienes los hacían. Ahora simplemente imprimes en gran formato fotografías o imágenes pre diseñadas. Le daba mucho mérito a los dibujantes.

    Angélica me envió un correo con el catálogo, que está en el software francés PMB pero lo pasarán a Koha; También me envió el sitio web de la Cinemateca Distrital con su programación, publicaciones digitales, convocatorias, y demás información; las publicaciones de la Cinemateca Distrital, la cuenta de Facebook de la Cinemateca y de BECMA y la cuenta de Twitter de la cinemateca.

    Los alrededores de la biblioteca

    La BECMA se encuentra en el Teatro Jorge Eliecer Gaitán, muy cerca de la Astroteca del Planetario y la Biblioteca Nacional de Colombia. Sobre la carrera séptima hay una enorme población flotante, es decir gente que transita sobre ese lugar, pero que no viven en él.

    Hay una gran oferta gastronómica, cultural y turística. Particularmente me gusta que una cuadra hacia el sur, sobre la carrera séptima, se encuentra la Pastelería La Florida. Este pechito se hizo fuerte a punta del pan de La Florida. Mi abuela materna es pastelera y panadera y eso hizo que me gustaran únicamente los mejores panes y pasteles. Es un poco triste ver con desdén muchos de los panes que hay en la ciudad, pero cuando encuentras algo bien hecho, lo disfrutas mucho. Nunca probaría una empanada sin azúcar (así las hace la abuela, receta pastusa) o un pan Bimbo o Comapan.

    Las fotos

  • Día 5: Biblioteca El Parque #30dias30bibliotecas

    Esta publicación hace parte del reto 30 días, 30 bibliotecas. Es una biblioteca que fue cerrada, por tal motivo aparece en el mapa con un icono rojo. Actualización: La biblioteca se encuentra funcionando en la actualidad.

    La ubicación de la Biblioteca El Parque

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    La visita

    Fui en bici a esta biblioteca. Al visitar el Parque Nacional, siempre la veía. Nunca entré, pero en mi mente sabía de su existencia.

    Estaba cerrada. No porque hubiera ido en un horario en donde no atendieran, sino porque esta biblioteca dejó de prestar sus servicios a la comunidad. Cuando estaba en la entrada, un señor llegó con su hija pequeña.

    – ¿Está cerrada? Me preguntó

    – Si, pero creo que cerrada del todo.

    – Ah…

    – Señor disculpe ¿vino alguna vez cuando estaba abierta?

    -Si y hacían actividades para niños.

    – Lástima. ¿Y más o menos cuándo fue eso?

    – Creo que en noviembre del año pasado (2015).

    Entrada de la Biblioteca El Parque, atravesada por canecas de basura y vallas
    Entrada de la Biblioteca El Parque, atravesada por canecas de basura y vallas

    Fui al teatro que queda al lado. Encontré a una mujer de seguridad. Le pregunté sobre la biblioteca.

    Hace dos años aproximadamente que esta biblioteca está cerrada. IDARTES la convirtió en oficinas.

    Le agradecí y me fui. Luego, comentando esto con Leonardo, me planteó dos asuntos interesantes:

    Al parecer IDARTES, la oficina de la Alcaldía de la cual depende esta biblioteca, no está muy bien con el gobierno actual. Puede ser una razón que valdría la pena verificar. De ser así no sólo esta biblioteca, sino todas las que dependan de IDARTES están en potenciales problemas.

    El otro punto de Leonardo fue ¿Y qué hicimos los bibliotecólogos para evitar el cierre de esta biblioteca? También es un punto a validar, pero no recuerdo que entidades o personas se hayan pronunciado al respecto. Como gremio, parece que nos resulta tremendamente ofensivo que la dirección de una biblioteca sea asumido por una persona sin el título de bibliotecólogo; pero si cierra una biblioteca entera, que tiene el potencial de albergar a decenas de bibliotecólogos en diferentes tareas, nos tiene sin cuidado. Si es así, creo que deberíamos revisar nuestras prioridades.

    He estado en algunos eventos donde se habla de promoción y defensa de las bibliotecas o «advocacy» bibliotecario (aquí el más reciente). También se menciona la implementación de los Objetivos de Desarrollo Sostenible de Naciones Unidas y su aporte desde las bibliotecas, pero ¿cómo se traduce eso al diario vivir de las personas? Creo que aquí se evidencia: solicitando que no se cierren estos espacios. Pidiendo a las oficinas encargadas y a los gobernantes que elegimos que no despojen a la ciudadanía de estos espacios para el acceso a la información. La información es poder y cerrar estos espacios es debilitar a la ciudadanía y las capacidades de las personas.

    Espero que este cierre sea momentáneo, pero esto también demuestra que las opciones para acceder a la información no son eternas y si no las reclamamos podrían desaparecer. Las bibliotecas y los espacios públicos deben cuidarse y construirse en comunidad.

    No conoczo mucho el contexto de esta biblioteca más allá de lo que me dijo la persona de seguridad. Espero averiguarlo para publicar más sobre el tema.

    ¿Qué se te ocurre para solicitar la reapertura de esta biblioteca?

    Actualización (2017-08-12): La biblioteca se encuentra funcionando en la actualidad.

    Las fotos