Aquí mi propuesta para pasar del acceso abierto a la ciencia abierta, en la Semana del Acceso Abierto 2018: publiquemos el «código fuente» incluso aunque no seamos desarrolladores de software.
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Aquí mi propuesta para pasar del acceso abierto a la ciencia abierta, en la Semana del Acceso Abierto 2018: publiquemos el «código fuente» incluso aunque no seamos desarrolladores de software.
El pasado 8 de mayo el grupo de estudiantes de Ciencia de la información – Bibliotecología de la Pontificia Universidad Javeriana, Sinergia, me invitó a hablar en el laboratorio en un espacio creado por ellos denominado #TardesEnElLabCI.
Para el evento retomé una propuesta realizada anteriormente para iniciar actividades de este tipo en el laboratorio. La propuesta inicial se titulaba Descripciones y usos de licencias abiertas, para el marco de un evento de trueque que se esperaba realizar en ese lugar, desafortunadamente no se pudo concretar en ese momento. En esta ocasión tomé algunas bases de esa propuesta y la enriquecí con temas de interés del momento: P2P, trabajo con información abierta y otras dinámicas de intercambio de contenidos para la investigación.
Con siete asistentes itinerantes durante toda la sesión inicié con un ejemplo de la inclusión de nuevas tecnologías en la comunidad indígena Yir Yorot, del norte de Australia, que había visto hace un par de años en el libro Código fuente: la remezcla. Esto dio paso para hablar sobre los problemas y posibles soluciones sobre el uso de las tecnologías en el mundo de hoy, por supuesto, desde nuestra profesión. A este ejemplo se le sumaron algunos apuntes de la reciente charla de Michel Bauwens en Bogotá, el proyecto Folk Society que se está desarrollando en ecuador y algunos apuntes sobre licencias abiertas presentados en publicaciones anteriores en este blog.
Nota: Desde nomono reconocemos el valor de estos espacios y estaremos al tanto de nuevas invitaciones y medios para apoyar y difundir este tipo de proyectos.
Las Tardes en el LabCI son un esfuerzo por fomentar espacios de apropiación de un espacio de creación, experimentación y difusión del conocimiento, el laboratorio, para el intercambio de ideas y una que otra experiencia en torno a temas de interés de estudiantes y profesionales de la información. Más información en este o este sitio. Y un Bous track, como parte del apoyo inédito 😉 y, todavía, sin comentarios de los integrantes del grupo. Pero ahí está.
Sobre acceso abierto se ha hablado mucho durante los últimos años, sin embargo recorriendo algunos sitios institucionales, repositorios o editoriales universitarias que se han acercado a este concepto y lo han adoptado en su qué hacer, se puede encontrar algunas particularidades, en la presentación y aplicación de las licencias que usan sobre sus contenidos y la etiqueta «Open…». Tratando de presentar contenidos para explicar el acceso abierto encontré en el portal de Creative Commons-Chile una publicación en donde explican las licencias desde el Copyright, como el más restrictivo hasta el Dominio Público, obviamente pasando por los matices que ofrecen las combinaciones de las licencias Creative Commons, y lo mejor presentando esta información de manera gráfica, utilizando los colores de un semáforo, en donde el rojo representa la «C», amarillo «CC» y el extremo del verde «DP»:
¿Qué tan abierto es el acceso a los contenidos académicos en Colombia? A partir de esta simple ilustración podrán sacar sus propias conclusiones.
Por otro lado, este vídeo animado creado por PHD Comics, disponible en YouTube, ilustra de buena y sencilla manera qué es el acceso abierto (Open Access).
Con comentarios tan contundentes como:
«Las revistas no producen el material, no le dan trabajo a la gente que escribe los artículos ni menos emplean a quienes los revisan. Eso no tiene sentido respecto de lo que la ciencia se supone que es. Ciencia es descubrir cosas nuevas y distribuir ese conocimiento. Es irracional pensar que los científicos son financiados con dinero público para investigar y que luego de años sus investigaciones no estén disponibles para la gente. No tiene sentido»
«Hay dos componentes del Open Access, el primero es que los artículos estén disponibles gratis para ser leídos. La segunda parte que es igual de importante, es que estén disponibles para ser reutilizados, ya que el conocimiento se construye creando relaciones entre artículos»
A propósito del documento publicado en EPI por Javier de la Cueva titulado El nuevo canon a las universidades: tras la apropiación del canon digital para las copias privadas, la del open access, el cual trata sobre la actual reforma a la Ley de propiedad intelectual en España, en donde los contenidos publicados en acceso abierto de las universidades y los entornos virtuales de estas, serán propiedad administrados por una entidad de gestión.
… Con mucha gracia y verdad respondió un corsario, siendo preso, a Alejandro Magno, preguntándole este rey qué le parecía cómo tenía inquieto y turbado el mar, con arrogante libertad le dijo: y ¿qué te parece a ti cómo tienes conmovido y turbado todo el mundo? Mas porque yo ejecuto mis piraterías con un pequeño bajel me llaman ladrón, y a ti, porque las haces con formidables ejércitos, te llaman rey.
San Agustín. La ciudad de Dios. Tomo I, Libro cuarto, capítulo IV.
Encontré esta charla en TED, de William Noel titulada «Revelando el códice perdido de Arquímedes» y no sólo revelan un texto antiquísimo de Arquímedes, sino que revelan tres y además nos dan el secreto de la conservación.
En su charla, William Noel nos explica cómo descubrieron un texto nunca antes visto de Arquímedes mediante un acelerador de partículas. Aunque esto de por sí ya es sorprendente, nos muestra que el segundo texto hallado es un discurso de Hipérides en la corte de justicia atniense, en el siglo IV A.C.:
«Lo mejor es ganar, pero si no puedes ganar, entonces deberías pelear por una causa noble. Consideren a los espartanos, ganaron numerosas batallas, pero nadie recuerda lo que fueron. La única batalla que los espartanos pelearon y que todos recuerdan es la batalla de las Termópilas donde fueron masacrados hasta que quedó un sólo hombre, pero pelearon por la libertad de Grecia».
Como si fuera poco, William nos habla del estado ideal de la información para hacerla inmortal: Todo lo que hallaron lo pusieron en línea, en archimedespalimpsest.org, las imágenes y los metadatos (como puede verse aquí), con una licencia Creative Commons atribución, compartir igual, que permite usos de esta obra incluso con fines comerciales.
El cierre del video menciona la forma para hacer inmortal la información:
Lo que hay que hacer con la información, si quieren que sobreviva, es divulgarla para que todos la tengan, controlándola lo menos posible. Y las instituciones pueden aprender de esto…
Eso fue justo lo que pasó con Wikileaks y los múltiples bloqueos que sufrieron. Si no hubiera sido por los servidores espejo, es muy posible que la información de Wikileaks se haya perdido para siempre.
Por otro lado suena muy interesante la idea de tener una única biblioteca mundial. Las restricciones hacen que la información se disperse, pero ¿Qué pasaría si pusiéramos en común la mayor cantidad de obras culturales? ¿Cuál sería el impacto a la educación y a la investigación? Internet ha ayudado a que este proyecto se materialice de alguna forma, pero a medida que pasa el tiempo Internet se ha vuelto más cerrado. Tal vez Internet sea sólo el reflejo de cómo evoluciona nuestra mente como especie.
Realicé una entrevista a la directora de la Biblioteca de la Universidad Javeriana, Dra. Silvia Prada Forero. Puede escucharse o descargarse el audio de la entrevista que gentílmente nos concedió al final de este post. A continuación está la transcripción editada de la entrevista.
Hiperterminal.com (H): Estamos con la Dra. Sulvia Prada, Directora de la biblioteca de la Pontificia Universidad Javeriana sede Bogotá. ¿Cómo está doctora?
Silvia Prada (SP): Bien, gracias.
H: Esta entrevista es para hablar sobre el préstamo de material en las bibliotecas, cualquier tipo de préstamo, pero específicamente sobre material audiovisual. Tenemos algunas preguntas para ver cómo funciona el préstamo en la biblioteca, específicamente en esta biblioteca ¿cómo funciona el préstamo de material audiovisual?.
SP: Como un préstamo de libros común y corriente. (Los documentos) se lleva(n) a la casa. Prestamos películas, prestamos videos, prestamos conferencias, prestamos audiciones musicales y se presta exactamente por ocho (8) días.
H: En la Universidad ¿han tenido algún reclamo por derechos de autor?
SP: No… Que yo sepa no. Yo llevo hasta ahora año y medio. Entonces no sé.
H: Algo que pasó con la Universidad de los Andes en el 2010, que bueno, justo en su paso de Bibliored a la biblioteca de la Javeriana, es que en la Universidad de los Andes recibieron una carta de una organización llamada PRACI y ellos decían que las bibliotecas estaban infringiendo el derecho de autor por hacer préstamo externo de material audiovisual. ¿De pronto conoce algo del tema?
SP: No. Yo llegué a finales del 2010 y hasta ahora me estoy enterando por usted.
H: ¿Hay otros servicios relacionados con biblioteca digital, de pronto préstamo de documentos electrónicos en la biblioteca?
SP: Préstamo como tal no. Consulta…
H: …consulta, a través de bases de datos.
SP: Si, claro. Consulta de bases de datos. Tenemos 169 bases de datos, todas tienen suscripción… pagas. Hay otros recursos que son gratis, acceso libre. Nosotros hacemos las suscripciones año anticipado. Se suscribe un contrato con el proveedor de la base de datos y las únicas personas que pueden consultar las bases de datos son los Javerianos, llámense estudiantes, administrativos o egresados con su clave y contraseña. Ahí no estamos infringiendo porque estamos pagando por el acceso a la información.
También tenemos nuestro repositorio que hasta ahora estamos conformando. No te puedo dar información porque estamos configurándolo. La Universidad está pagando. Si hablamos de derecho a la información, estamos pagando por ese derecho.
H: No sé si quiera hablar sobre las modificaciones por el Tratado de Libre Comercio sobre derecho de autor.
SP: Se está hablando mucho de Open Access, se esta hablando mucho del derecho de autor, pero en este momento yo pienso que el TLC entró en vigencia pero no hemos tenido un contacto puntual. Se está hablando de no seguir comprando bases de datos porque la información está a la orden del día para todo el mundo. Se está hablando que hay instituciones que están cortando la suscripción a las bases de datos porque prefieren consultar en Open Access. No tenemos información de ese estilo.
H: La biblioteca provee acceso a Internet. Es decir, uno puede entrar con su computador o un dispositivo móvil y conectarse a redes inhalámbricas. ¿Sabe o conoce si la biblioteca o la Universidad tienen algún plan… porque las bibliotecas están siendo tratadas como proveedores de servicios de Internet como si fueran empresas del tipo Telmex o ETB?
SP: No, que yo sepa no.
H: ¿Conoce alguna asociación que represente los intereses de las bibliotecas en estos temas de derechos de autor?
SP: Por ahora no. No nos han convocado, ni sé por ahora nada de eso…
H: ¿Quién convocaría?
SP: No sabría…
H: Bueno. Por ahora eso. Mil gracias. ¿Algo para añadir?
SP: Yo pienso que las bibliotecas estan a la orden del día en el acceso libre a la información, el acceso abierto a la información y que la Universidad Javeriana está presta a estos cambios que significan información para todos. Romper la brecha informacional y la biblioteca se está sumando a lo que signifique acceso libre pero respetando la propiedad intelectual.
H: Doctora Silvia, muchas gracias.
¿Cómo se pueden financiar y sostener proyectos de acceso abierto? Esta pregunta, en cuanto a publicaciones, me ha dado vueltas en la cabeza. ¿Como financiar algo que se va a entender como gratuito? ¿Qué rentabilidad se va a tener?
Pues bien, en lo primero en lo que no hay que pensar en lo que se hubiera hecho antes, en cómo hubieran resuelto años atrás las editoriales o autores este problema. Más que enfocarnos en los textos sobre el tema se debe pensar en el contexto; en lo que hay que centrarse es en que la sociedad y sus necesidades cambiaron por tanto las condiciones de sostenibilidad de proyectos lo hicieron también.
Ya no es bueno fiarse de proyectos largos y densos con la expectativa de publicarlos alguna vez y esperar a que la gente se anime a pagar por el producto de tan extenso trabajo. Los procesos son más dinámicos, las investigaciones y sus resultados deben tener niveles fuertes de difusión en donde si no es el producto lo único que me garantiza la sostenibilidad es el papel de difusión del autor o autores a través de reuniones, incorporación a grupos de trabajo, creación de proyectos derivados o conferencias. Lo que puede potencializar la información y conocimientos de los artículos publicados en la transmisión tácita inalcanzable en los textos de este tipo. Es el valor agregado que quienes producen contenido pueden dar a los demás.
O como bien escuché en alguna ocsción: «la gente no paga para acceder a los contenidos sino por crear conocimiento y generar habilidades…»
Toda buena intención tiene sus buenos obstáculos. Las instituciones, principalmente las educativas, se han preocupado por el fortalecimiento y motivación a las actividades de investigación dentro de la misma institución; una gran vía que facilita estos procesos se podría ver en el uso de repositorios de acceso abierto.
Concuerdo con la opinión de @gaitandeomaha sobre la obtención de información completa y de calidad, pero ¿qué pasa con la producción de la misma? En países como el nuestro se ha optado por tomar una actitud de consumidores y más bien poco de prosumidores de información.
A pesar de que han sido las instituciones educativas formales las que se han preocupado por que sus investigadores contribuyan con sus trabajos a la creación y mantenimiento de sus repositorios, también existen aquellos curiosos que han buscado un lugar en donde puedan incluir sus trabajos para que sea evaluado por sus pares y si es posible contribuir con la creación de nuevo conocimiento.
Esta última iniciativa atrae un poco más mi atención, repositorios abiertos a cualquiera que tenga algo que mostrar y las ganas para desarrollar trabajos en conjunto con otros investigadores con las mismas inquietudes y casi que un mismo fin. Así no solamente la comunidad «tradicional» serán quienes se ocupen de crear y distribuir la información sino que se abre un espacio al margen de la formalidad académica para quienes quiera exponer sus ideas y contribuir al desarrollo de nuevas investigaciones, nuevas ideas y nuevo conocimiento.
Es curioso pensar en cómo se movía la información científica hasta mediados del siglo pasado, según los relatos de un profesor formado en los primeros años de la Bibliotecología en Colombia, recuerda lo grato que era poder ir a congresos internacionales, a conocer más de las ideas de otros profesionales y por supuesto a conseguir correos postales para intercambiar mensajes entre colegas un par de veces al año, con la esperanza remota de organizar proyectos o generar conocimiento entre pares.
Podrán imaginarse ahora por qué para las personas ya un poco mayores es tan impactante las actuales tecnologías de información y comunicación. Tecnologías que para nosotros son tan elemental y cotidianas.
Acercandome un poco en el tema de Open Acces la idea que me queda es: si el conocimiento se construye a partir de las ideas (y con la ayuda) de otros ¿por qué restringir la difusión de artículos científicos con altos costos de acceso o por medio de licencias restrictivas que impidan el surgimiento de nuevo conocimiento a partir de trabajos e investigaciones ya elaboradas? Pues bien, Paul Ginsparg seguramente en algún momento se hizo una pregunta similar y creó uno de los primeros repositorios abiertos sobre información científica con el fin de facilitar el acceso y la comunicación de artículos entre pares, arXiv.
La idea de crear un medio alternativos para la transferencia y comunicación de la actividad científica ha generado una ruptura con los mecanismos tradicionales, especialmente en las restricciones y licenciamiento, la mediación de las editoriales y la forma de evaluación y distribución de los contenidos. Mientras leía encontraba comentarios sobre el movimiento de acceso abierto (Open Acces) en donde comparaban su esencia con la naturaleza misma de internet. ¿Y por qué no? se imaginas redes de redes personas trabajando e interconectando temas comunes en pro de la creación de nueva información y conocimiento.
Además de las ventajas en cuanto a comunicación y difusión a través de la web también se cuenta con un soporte legar que favorece los intereses del autor como también el de las demás personas interesadas en acceder, referenciar e incluso modificar los contenidos de los documentos bajo licencias flexibles como el caso de Creative Commons (más información aquí). Ahora, la tarea que tenemos por delante es perder la timidez y el miedo a compartir nuestras ideas con los demás, formar y formarnos en el uso de estos recursos con el fin de explotar y fomentar la creatividad en comunión.
Jhonny Pabón, de Propiedad Cultural me recomendó el video Managing copyright to advance research and teaching donde hablan del derecho de autor y los problemas que han surgido para los investigadores y estudiantes para acceder a recursos protegidos por copyright. Esta charla es moderada por Ann Wolpert, la encargada de las bibliotecas del MIT.
Este video evidencia la pérdida de control que padecen los investigadores sobre sus obras al ceder los derechos de autor a editoriales. Claude Canizares, el primero en hablar luego de la presentación de Ann Wolpert, comenta sobre el choque que enfrenta la industria editorial contra las universidades como el MIT cuya misión es transmitir conocimiento; publicarlo y diseminarlo gratuitamente. Esto se ve reflejado en bibliotecas colombianas, por ejemplo la misión de Bibliored (Bogotá), como dicen en su sitio, es «Trabajar por el desarrollo social y cultural de Bogotá, fomentar la lectura y la escritura y garantizar el acceso a la información, al conocimiento, al arte y a la recreación, como elementos esenciales e insustituibles para el mejoramiento de la calidad de vida de sus habitantes.» Por su parte, la Red de Bibliotecas de Medellín en su sitio mencionan en su objetivo principal la «…oferta de servicios de acceso al conocimiento» y entre sus objetivos específicos «Divulgar el conocimiento y la información» pero ¿Qué sucede cuando las bibliotecas quieren brindar acceso gratuito a la información y los autores, editoriales o «derechohabientes» quieren conseguir una retribución económica por consultar sus documentos?
Algo que he aprendido en este tiempo es que si un autor quiere conservar sus derechos y no compartir su producción está en todo el derecho de hacerlo y deben respetarse estas decisiones. Por otra parte, si los autores, en el caso del video del MIT investigadores, quieren compartir sus documentos porque su trabajo ya es retribuido por las universidades a las que trabajan, pueden usar cosas como Science Commons, presentada por Thinh Nguyen. En su presentación Thinh muestra el aumento en el factor de impacto de PLoS Biology, una revista que apuesta a liberar sus contenidos, lanzada en el 2003. ¿Qué quiere decir esto? El factor de impacto mide las citas que reciben los artículos. Imagina que tu artículo es muy bueno, entonces muchas personas se basarán en él para realizar sus trabajos y lo mencionarán en sus artículos. El tener un factor de impacto alto quiere decir que los artículos han sido mencionados por otras publicaciones científicas. Thinh mencionó que PLoS Biology llegó a tener el factor de impacto más alto (14.7 en ISI Web of Knowledge) convirtiéndola en la publicación sobre biología general más citada. Ahora piensa en esto: ¿No hay una ventaja de acceso aquellos quienes publican sus documentos sin cobrar contra aquellos que cobran por leer su documento? ¿Los investigadores viven para hacer dinero al vender sus artículos o lo que importa es que su trabajo sirva de base para el desarrollo científico?
En este punto llegamos a la Iniciativa de Budapest para el Acceso Abierto y me pregunto por algo que puede ser escencial para autores y bibliotecas: ¿quién se beneficia por cobrar por los contenidos de las publicaciones? Si a los autores les sirve que sean leidos para que los citen y así eleven su factor de impacto; a su vez una de las misiones de las bibliotecas es difundir la información y el conocimiento algo empieza a sonar raro en este sistema.
De las cosas que más me sorprendieron: Para acceder al artículo que publicó Isaac Newton sobre el invento del telescopio, aunque esté en dominio público hay que pagar U$9 para conseguirlo por la editorial. Esto por un momento me recordó al post sobre arduino.
¿Pueden desaparecer las bibliotecas en la era digital al no poder almacenar y conservar información por problemas legales? ¿Qué papel juega la biblioteca frente a las obras en dominio público?