Etiqueta: IFLA

  • Se buscan testimonios sobre la relación derecho de autor – bibliotecas

    La Fundación Conector, Open Connection y ASCOLBI están trabajando en una investigación sobre cómo incide la legislación actual colombiana sobre derecho de autor en las bibliotecas del país. La idea de esta investigación es recoger testimonios, dudas o comentarios de bibliotecarios y usuarios de bibliotecas que hayan encontrado necesidades de actualizar la legislación de derecho de autor y bibliotecas en Colombia.

    ¿Le gustaría participar con su testimonio?

    Si usted tiene un testimonio que le gustaría compartir, puede encontrar más información de la investigación en este enlace para la investigación en Colombia. Lo que se busca es identificar hechos que muestren cómo están funcionando las bibliotecas colombianas y las peripecias que deben realizar los usuarios y bibliotecarios para no infringir las normas en derecho de autor.

    Si vive fuera de Colombia y quiere compartir su testimonio sobre un país de América Latina y el Caribe, contacte a su asociación de bibliotecólogos local. Seguramente allí estarán realizando la misma investigación.

    Una investigación regional

    Si bien ASCOLBI, Conector y Open Connection están trabajando en la investigación para Colombia, este es un trabajo regional. En el blog de IFLA de la sección de Latinoamérica y El Caribe se publicó el llamado regional para realizar esta investigación.

    Si bien el estudio de Kennetth Crews muestra las excepciones y limitaciones al derecho de autor para bibliotecas, estudio que fue actualizado en 2015 (aquí el texto de la versión actualizada); esta investigación busca recolectar la perspectiva de las personas y comunidades que visitan las bibliotecas. Crews da una visión normativa, mientras que esta investigación explorará los testimonios de la gente.

    Vale la pena destacar que Colombia no presentó grandes variaciones en su legislación entre un informe y otro. Crews no registró el cambio que sufrimos con la ley 1680 de 2013. Si bien son buenas noticias, es un cambio chico, luego de haber vivido una proliferación de proyectos de ley que modificaban las normas de derecho de autor en Colombia desde el 2011.

  • IFLA critica el licenciamiento como solución en el Parlamento Europeo

    Este documento muestra cómo diversas asociaciones están presionando porque el derecho de autor no sea una barrera para el acceso a la información digital. Recientemente Copyright for Creativity, EBLIDA, LIBER y Communia organizaron un desayuno de trabajo con el Parlamento Europeo para exponer los problemas que acarrea el licenciamiento, como alternativa a las excepciones y limitaciones al derecho de autor para bibliotecas y archivos.

    ¿Cuál es el problema?

    El problema es que diversas organizaciones están abogando porque el derecho de autor amplíe sus excepciones y limitaciones para bibliotecas y archivos. Esto haría que haya una normativa global que le permita a dichas instituciones hacer usos de obras que por ahora sólo pueden realizarse si los autores o titulares del derecho de autor las autorizan.

    El licenciamiento es una figura que autoriza a que terceros (en este caso las bibliotecas y los archivos) usen material sujeto a derecho de autor; es como un permiso especial que los autores le darían a las bibliotecas. El problema es que con el licenciamiento, las bibliotecas y archivos siguen estando atadas a la buena voluntad de los autores. Una normativa de excepciones y limitaciones haría obligatorio a los autores a que les permitan a las bibliotecas y archivos usar las obras para brindar acceso a sus usuarios.

    A continuación el comunicado publicado por IFLA.

    El comunicado de IFLA

    Esta es la traducción al español del texto realizado por Julia Brungs, hecha por Jaime Ríos Ortega.

    Imaginen un mundo donde cada libro en cada estante alrededor del mundo están sujetos a diferentes términos y condiciones de uso. Esta es la realidad del entorno digital que ahora vivimos. Licensing Briefing Document

    El pasado miércoles 6 de mayo, la IFLA en conjunto con las organizaciones Copyright for Creativity, EBLIDA, LIBER y Communia organizaron un desayuno de trabajo para los diputados del Parlamento Europeo y sus asesores. La reunión abordó la relación entre el Derecho de explotación y reproducción (Copyright) y las licencias, y se demostró que el licenciamiento no es la solución al problema que enfrentan las bibliotecas cuando ponen los materiales a disposición de sus usuarios en el medio digital. En cambio, deben actualizarse las excepciones y limitaciones al derecho de explotación y reproducción de las obras para garantizar que las bibliotecas puedan realizar su función esencial en la sociedad.

    Las bibliotecas han aceptado que las licencias son parte del entorno contemporáneo de la información y que establecen los términos sobre la manera como usamos y reutilizamos las obras protegidas por derecho de autor. Sin embargo, las licencias que invalidan la legislación autoral perjudican y restringen la creatividad y la innovación. Esto se debe a que el acceso y el uso de los contenidos digitales se rigen casi en todo el mundo, no por lo que establecen las el derecho autoral de cada país, sino por aquello que imponen contratos privados, y en ocasiones confidenciales.

    Esencialmente, la reunión fue una reacción a las recientes discusiones, particularmente en Europa, que se han centrado en las licencias como un reemplazo a la modificación de excepciones y limitaciones al derecho de explotación y reproducción. Lo anterior derivó hacia una modificación a las discusiones sobre la actual reforma en la legislación autoral europea por parte de María Martín-Prat, Jefa de la Unidad de Copyright y Directora General de la Comisión Europea para redes, contenido y tecnologías de la comunicación (DG Content). Seguido por las exposiciones de Paul Ayris, Director de Servicios Bibliotecarios de University College London; Jill Cousins, Director Ejecutivo de Europeana; y Alec Tarkovski, de Creative Commons Polonia.

    Todas las presentaciones señalaron que el completo reemplazo de las legislaciones autorales por el licenciamiento restringe el acceso y reutilización de la información y el conocimiento en el entorno digital, al igual que obstaculiza la investigación y la creatividad.

    Después del desayuno de trabajo, la Unión Europea anunció su nueva estrategia «Digital Single Market» la cual promete una legislación europea más moderna en materia de derecho de explotación y reproducción de obras, que estará lista a finales de 2016. La IFLA, en colaboración con los miembros europeos, firmemente han propugnado un marco habilitado con excepciones que faciliten de modo decisivo la preservación digital, el préstamo electrónico y la transferencia de información más allá de las fronteras políticas que en su conjunto, ayuden a la investigación por parte de los usuarios de las bibliotecas. Se incorporan excepciones o limitaciones a la legislación autoral para que sean obligatorias y no puedan anularse por contratos. Las licencias ocupan su lugar, pero no sustituyen leyes equilibradas de explotación y reproducción de obras protegidas.

    Para obtener más información general sobre la problemática originada por las licencias, consulte el documento informativo, elaborado por la IFLA, LIBER y EBLIDA con motivo de su reunión.

    Consulte la versión web en inglés.

    Julia Brungs
    Gerente de Políticas y Proyectos
    Federación Internacional de Asociaciones de Bibliotecarios y Bibliotecas (IFLA)

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  • IFLA firmó la Declaración de La Haya

    La Federación Internacional de Asociaciones de Bibliotecarios y Bibliotecas (IFLA)) firmó la Declaración de La Haya, anunciada el pasado 6 de mayo de 2015. Esta declaración busca que el derecho de autor no sea una barrera para el análisis de grandes cantidades de datos (big data).

    Si bien los hechos, los datos y las ideas no se protegen por el derecho de autor, éste fue un tema abordado en el Congreso de IFLA en Lyon, donde se presentaban casos donde no se podía hacer minería de datos, por restricciones legales. Un ejemplo de minería de datos es analizar todas las palabras publicadas en una revista de 1950 a 1970, para encontrar las que más se repiten en periodos de años, para generar por ejemplo nubes de las palabras más repetidas y visibilizar patrones.

     

    Traducción al español del comunicado: IFLA firma la Declaración de la Haya ¡Reforma inmediata a las leyes de propiedad intelectual!

    «Big Data puede reconfigurar el mundo y salvar vidas. Mediante su análisis podemos encontrar respuestas a desafíos tales como el cambio climático y las pandemias a escala global, se puede estimular las economías, se puede impulsar la investigación; pero antes, la legislación en materia de Propiedad Intelectual tiene que modificarse y debe mejorarse el acceso a la tecnología, logrando que los hechos, los datos y las ideas sean accesibles a todos por igual.»

    La organización Ligue des Bibliothèques Européenes de Recherche (LIBER) anunció el 6 de mayo la Declaración de La Haya sobre el Descubrimiento de Conocimientos en la Era Digital en Bruselas. La IFLA es uno de los primeros signatarios de la Declaración, la cual tiene por objeto promover acuerdos y suscitar consenso sobre la manera de permitir un mejor acceso a los hechos, los datos y las ideas para la extracción de conocimientos en la era digital. Creemos que quitando barreras al acceso y análisis de una gran cantidad de datos producidos por la sociedad, se pueden hallar respuestas a grandes desafíos como el cambio climático, la escasez y despojo de recursos naturales, y la globalización. No obstante, los marcos legales actuales, incluyendo el derecho de explotación y reproducción (Copyright) no siempre ayudan a la adopción de nuevos enfoques en la investigación, particularmente la minería de datos. La Declaración avala los siguientes principios que respaldan el enfoque de la minería de datos, con visión a futuro:

    1. La propiedad intelectual no está prevista para regular el libre
      flujo de hechos, datos e ideas, sino que tiene como objetivo
      primordial promover las actividades de investigación.
    2. Las personas deberían tener libertad para analizar y perseguir su
      curiosidad intelectual, sin temer a la vigilancia, el monitoreo ni a
      las represalias.
    3. Las licencias y los términos de los contratos no deberían restringir
      a los individuos para usar datos e ideas.
    4. Será necesario continuar indagando las nociones éticas en la
      aplicación de técnicas de minería de datos, en respuesta a la
      tecnología en constante cambio.
    5. La innovación y la investigación comercial basada en el uso de datos e ideas no estará restringida por la legislación en materia de
      propiedad intelectual.

    La Declaración propone una hoja de ruta para emprender acciones de defensa en favor de mejores políticas, infraestructura y herramientas. Ha sido muy oportuno el lanzamiento de la Declaración el mismo día que la Comisión Europea anunció su estrategia Digital Single Market.

    ¿Por qué es importante?

    Las bibliotecas tienen la oportunidad de aprovechar la sociedad de la información y consolidar su papel como agentes del desarrollo sostenible. Sin embargo, continuamente enfrentan retos en las restricciones a la minería de datos.

    Si bien, los datos no están protegidos por las leyes de propiedad intelectual; los textos, los documentos y las bases de datos de las que se extraen podrían estar sujetos a regulaciones de derechos de explotación y reproducción, derechos conexos o el derecho sui generis sobre bases de datos. La extracción, copia y transformación en un formato legible por máquina del contenido, una vez que se haya tenido acceso legalmente, pueden afectar a los titulares de los derechos de reproducción exclusiva. Asimismo, las medidas técnicas de protección correspondientes al contenido plantean otras restricciones. La IFLA ha propugnado reformas al derecho de explotación y reproducción, por lo que la Declaración refleja nuestro compromiso de conseguir un marco internacional habilitado en materia de derecho de explotación y reproducción (por ejemplo, acciones de la IFLA como Statement on Text and Data Mining y la labor ante la OMPI) que brinde suficiente protección a la creatividad y al acceso a la información, sin restringir a la investigación y el desarrollo del interés público.

    Lo que sigue después

    La Declaración de la Haya sobre el Descubrimiento de Conocimientos en la Era Digital es un marco distinto puesto que pide a los responsables políticos que proporcionen claridad jurídica sobre las problemáticas del derecho de autor, al mismo tiempo que solicita a los ciudadanos, a las pequeñas y medianas empresas (SME) y a las bibliotecas que hagan lo mismo y la firmen. La IFLA aprovechará esta oportunidad para exhortarlos a promover el acceso a la información y datos abiertos en sus regiones mediante la firma de la Declaración.

    Para más información sobre estos temas, consulte nuestra página web dedicada a las Limitaciones y Excepciones a Copyright en favor de Bibliotecas y Archivos.

    Fuente: http://www.ifla.org/node/9567 y traducción de Jaime Ríos Ortega.

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  • Percepciones del taller sobre fortalecimiento de asociaciones en Colombia

    Del 4 al 6 de Octubre del 2014 se realizó el taller de fortalecimiento de asociaciones, en el marco del programa Fortalecimiento de Asociaciones de Bibliotecarios (BSLA por sus siglas en inglés) de IFLA. Fui invitado por mi trabajo realizado en la Fundación Conector. En este texto analizo el objetivo del evento y las asociaciones bibliotecarias colombianas. Cierro con una propuesta, para no quedarme en una crítica al evento y pensar en su desarrollo. De antemano agradezco a los organizadores del evento por su invitación y por abrir un espacio para conocer tantas iniciativas y personas interesantes. En general mi percepción del evento es que tuvo más cosas buenas, pero siento mencionar también las malas en este texto. Espero que sirva para la reflexión y por supuesto son bienvenidas las críticas, precisiones o ajustes que se quieran hacer.

    El objetivo del evento

    A decir verdad no me quedó muy claro cual era el objetivo del evento. En la documentación que recibí puede leerse «El programa BSLA (sic) es una metodología general que ofrece abordaje estratégico para el desarrollo de capacidades y la sostenibilidad de las asociaciones de bibliotecarios. El programa beneficia a las asociaciones, bibliotecas y sus comunidades». ¿El objetivo era fortalecer las asociaciones existentes o crear una nueva asociación sostenible con todos los participantes?

    ¿Asociaciones o agremiaciones?

    Antes de profundizar más en el tema, creo que deberíamos aclarar los conceptos. Para mi la pregunta inicial debería ser: ¿Estamos hablando de asociaciones o de agremiaciones? Según el Diccionario de la Real Academia Española, en su definición de asociación puede leerse: «Conjunto de los asociados para un mismo fin y, en su caso, persona jurídica por ellos formada». Por su parte, un gremio se define como «Conjunto de personas que tienen un mismo ejercicio, profesión o estado social». En el evento se usó indistintamente el término agremiación y asociación, como si fueran sinónimos, cuando no lo son. Si vamos a hablar de agremiaciones, discusiones muy álgidas como el uso de tarjetas profesionales serían un buen punto de partida. Si vamos a hablar de asociaciones, la interdisciplinariedad es la clave, por lo que perfiles como una de los participantes, con estudios en ética y filosofía (aunque no en bibliotecología) resultaban muy valiosos. Fue una lástima que estos perfiles no llegaran más allá del primer día, en mi concepto por la falta de claridad en temas básicos como el aquí mencionado. También me pareció muy triste que algunas entidades se presentaran como los «encargados de expedir tarjetas profesionales». ¿Tan minúsculo es el impacto que esperan generar en Colombia?

    ¿Participaron quienes debían participar?

    Estoy estudiando las comunidades de práctica, como espacio de aprendizaje informal en mi maestría en educación. Etienne Wenger, en su libro «Comunidades de práctica: Aprendizaje, significado e identidad» menciona que las comunidades de práctica tienen dos cosas que les dan valor: Participar y cosificar.  El participar es sencillo de comprender, por la definición del diccionario y el significado que podemos darle por sentido común, sin embargo el cosificar es algo más complejo. Particularmente lo interpreto como la materialización de las prácticas en documentos o infraestructuras. Algo que me gustó bastante, fue que entre los asistentes generamos este mapa de participantes del evento, de esta forma creamos un producto o como diría Wenger «cosificamos». Al ver el mapa, las asociaciones realmente son menos que el total de los participantes, puede notarse al comparar la capa de asociaciones contra la capa de asistentes. ¿Realmente participaron quienes debían participar? ¿Cuál era el objetivo de invitar a muchos más grupos, personas o instituciones? Si el objetivo era invitar a los participantes del panorama bibliotecario, hacen falta instituciones y personas que están haciendo cosas interesantes, por ejemplo en otras ciudades además de Bogotá y Medellín.

    Las asociaciones colombianas

    Siento que las asociaciones colombianas son un grupo reducido, cerrado y sin un norte claro. En una mesa de trabajo de 7 personas agrupadas al azar en el que estuve en el evento, 5 no pertenecían a ninguna asociación y las dos que si pertenecían a alguna, eran sus presidentes o máximas autoridades. Al preguntar por qué no pertenecía ninguno de los 5 a alguna asociación, se manifestó que las asociaciones existentes representan una carga extra de trabajo y ningún beneficio. En esas condiciones es muy difícil que una asociación se mantenga y mucho menos que crezca.

    Las tarjetas profesionales de bibliotecólogos y archivistas en Colombia

    Resultó curiosos que los dos participantes que si pertenecían a asociaciones, estuvieran a favor del uso de tarjetas profesionales para que personas que no tengan formación en sus disciplinas se vean impedidas a ejercer la profesión. ¿A qué se debe la necesidad o esa enorme ansiedad a que el ejercicio deba tener tal requisito? ¿No es suficiente con el título profesional? O no será que somos tan malos en lo que hacemos que necesitamos recurrir a normas y leyes para que no nos quiten nuestros cargos. Particularmente me parece crítico este tema si estudio una carrera que tiene dos tarjetas profesionales. ¿No deberíamos hacer una revisión de fondo a la dichosa tarjeta profesional? Algo allí huele muy mal.

    En todo caso en ese escenario, estamos hablando de agremiaciones y no de asociaciones. El evento sigue quedando sin dar muchas luces al respecto.

    La descontextualización del problema

    Las presentaciones de expertos suelen ser interesantes, pero de nada sirven si no se contextualizan. Creo que los mejores momentos del evento fue cuando se dejó de lado la teoría para hablar de problemas reales del contexto colombiano. Espero que este texto apoye a la identificación del problema y a su identificación. Algo que me sigue preocupando es que se tomen las identificaciones de problemas como asuntos personales. Quiero ser claro en eso: No pretendo señalar a nadie, ni juzgar su trabajo, pero si que reflexionemos sobre lo que estamos haciendo. Si no podemos contextualizar los problemas porque sus involucrados se sienten ofendidos, creo que no vamos a poder avanzar.

    ¿Le recomendaría afiliarse a alguna asociación colombiana de bibliotecólogos o archivistas?

    Antes de afiliarse a una asociación colombiana, le recomendaría que les preguntara qué le ofrecen a cambio. Particularmente a las asociaciones a las que yo podría afiliarme, todas con base en Bogotá, no hay ninguna que me ofrezca algún beneficio que valga la pena por la inversión en tiempo, dinero y trabajo que estoy dispuesto a dar. El enfoque de una de las presentaciones hizo énfasis en el voluntariado o trabajo ad honorem de sus afiliados más recientes. Perdón, pero me parece que el trabajo y tiempo de las personas debe remunerarse. No puedo dejar de pensar en la respuesta ejemplar de un joven a una práctica sin remunerar. Si no hay remuneración en otros asuntos como reconocimiento, representatividad o al menos pasar un buen rato, creo que las asociaciones si deben meterse la mano al bolsillo si quieren que alguien sirva el café en sus encuentros, que fue el ejemplo que usaron.

    Una propuesta

    Algo que el evento hizo fue abrir espacios de encuentro y participación, lo cual aplaudo y agradezco a sus organizadores.  Sin embargo les propongo que las asociaciones revisen el objetivo de asociarse y sobre todo que escuchen a sus potenciales socios. Una participante mencionó que le interesa asociarse para compartir tiempo con sus colegas en espacios menos académicos o que no se discuta lo laboral. Creo que las asociaciones no deben enfocarse únicamente en temas sagrados, sino que pueden servir para pasarla bien y ya. El que una asociación no sea académica o profesional no implica que sea una mala asociación.

    Revisen si la tarjeta profesional es el objetivo de su asociación, sobre todo en un mundo que le está apuntando a la interdisciplinariedad. Un presidente de estas asociaciones, cuando le pregunté por sus mecanismos para atraer a nuevos integrantes me comentó que deberían pensar en «incluir videojuegos y cosas por el estilo». Por favor, dejen de tratar a sus potenciales socios como si no tuvieran cerebro. Una cosa son los intereses en temas digitales y otra los sistemas de remuneración no monetario para los asociados. Si lo que interesa es que más personas hagan parte de sus asociaciones, podrían empezar por dejar de entenderse como una agremiación. Si son una agremiación, piensen en la interdisciplinariedad que se da por la sociedad red de la que habla Castells, la sociedad de la información y las sociedades del conocimiento que menciona UNESCO o cualquier otra cosa que les haga ver más allá de los muros de su institución.

    Por otro lado, si hacen un evento, no solo participen, sino que cosifiquen. Ojalá que al final de cada reunión o evento que se haga, haya un producto. Revisar el objetivo de la reunión puede ayudar a afinar el producto que debería tenerse o construirse. Ojalá se publique y pueda compartirse, para que sirva en beneficio de los participantes u otros actores involucrados en los escenarios de los profesionales de la información.

    Trabajemos en red. Si la idea del evento es involucrar a otros grupos, pensemos en que podemos hacer trabajo en red y distribuido. El mapa que construimos como producto del evento muestra el gran centralismo que tenemos. ¿No valdría la pena diseñar una comunidad de práctica nacional sobre el trabajo en bibliotecas, archivos, museos, centros de documentación y todo lo relacionado con profesionales de la información?

    ¿Que opinan? ¿Tiene sentido algo de lo que escribí aquí?

  • Mapa de contactos del evento de IFLA-ASCOLBI en 2014

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    Este mapa se categoriza así (click en el título para ver cada capa en pantalla completa, aquí todas las capas en pantalla completa)

    Redes
    Agremiaciones
    Asociaciones
    Instituciones
    Grupos

    Cada punto tiene una persona de contacto.

    Algunas precisiones

    Asociaciones y Agremiaciones: Las agremiaciones se dedica a una profesión específica, mientras que en las asociaciones pueden participar personas de diferentes profesiones.

    Grupos y redes: La red trabaja bajo varias instituciones, constituida formalmente. Los grupos pueden constituirse informalmente.

    Instituciones: Incluimos instituciones públicas y privadas.

    Este es un primer acercamiento para consolidar un sistema de contactos, está en borrador, por lo que pueden haber fallos hasta consolidarlo (tentativamente a mediados de octubre de 2014).

  • La representatividad en las decisiones sobre derecho de autor, bibliotecas y archivos

    El pasado 18 de Junio la Dirección Nacional de Derecho de Autor realizó una reunión en sus oficinas sobre el Comité Permanente de Derecho de Autor y Derechos Conexos –
    vigesimoctava sesión (o SCCR 28 por sus siglas en inglés, reuniones de las que ya hemos escrito antes). Estas reuniones son de interés para las bibliotecas y archivos, debido al trabajo que se ha venido adelantando por estas frente a las necesidades identificadas en cuanto a derecho de autor.

    Es curioso que a esta reunión, que es de gran interés para bibliotecólogos, archivistas y en general profesionales en ciencia de la información, la mayoría de invitados sean de instituciones que si bien son bibliotecas o archivos, no necesariamente representan a la totalidad de estas agremiaciones. Brilla por su ausencia el Consejo Nacional de Bibliotecología, el Colegio Colombiano de Bibliotecología ASCOLBI, el Colegio Colombiano de Archivistas y agrupaciones similares de lugares fuera de Bogotá. Esto quiere decir que el futuro de las bibliotecas y archivos en Colombia no se está decidiendo entre las instituciones que representan agremiaciones de bibliotecas y archivos. Por otro lado es una discusión centralizada en Bogotá. Un amigo me comentó que podría sonar demasiado presumido pretender que a este tipo de reuniones inviten a personas interesadas en el tema, pero eso podría implicar que la sociedad civil no puede participar en estos espacios. ¿Hace falta pertenecer a una determinada biblioteca o archivo para que te inviten? Si es así ¿A cuál? porque no todas las bibliotecas participan.

    Según la invitación «El propósito de la reunión es contarles lo acontecido en la sesión del Comité Permanente de Derecho de Autor celebrado en el mes de abril y recibir de parte de ustedes los comentarios que estimen pertinentes en relación con los textos base de discusión y el trabajo futuro». Lo que plantea una dinámica de «llegar con la tarea hecha». En el 2013 presentamos unos comentarios en otro debate sobre derecho de autor, a los que hasta ahora no se ha tenido respuesta. En ese entonces y ahora parece persistir el mismo problema, si bien se trata de dos entidades diferentes: ¿Cuál es la metodología para recibir, debatir y consensuar estos comentarios?

    No me queda nada claro cómo se está construyendo la posición del país. Además no entiendo por qué las entidades del Estado no hacen públicas las posturas que están tomando en estos espacios. Sé que hay un evento al que Colombia asiste y participa pero ¿Cómo se ven representados allí las bibliotecas y archivos del país? ¿Cuál es el papel de las asociaciones de bibliotecas, bibliotecólogos y archivos en estos espacios?

    El comunicado de IFLA

    Luego del SCCR 28, IFLA publicó en su sitio el siguiente comunicado.  La situación no es nada favorable para las bibliotecas y archivos del mundo.

    Las bibliotecas y archivos se marcharon con las manos vacías de las discusiones internacionales sobre Derecho de Autor, después de que otra vez los Estados Miembro no llegaron a un acuerdo.

    Estimados colegas:

    Nuevamente colapsaron las discusiones relacionadas con el instrumento internacional para las bibliotecas y archivos sin llegar a ninguna conclusión durante la 28° Reunión del Comité Permanente sobre Derecho de Autor y Derechos Conexos (SCCR – Standing Committee on Copyright & Related Rghts) del lunes 30 de junio al viernes 4 de julio en Ginebra. Al final, los Estados Miembros acordaron desestimar cualquier conclusión sobre las excepciones del derecho de autor para bibliotecas y archivos, así como el borrador de un tratado sobre difusión durante las primeras horas del sábado 5 de julio.

    Fue un cierre frustrante para una semana en la que las organizaciones de bibliotecas y archivos acudieron a Ginebra desde todas partes del mundo para participar en las discusiones, y con la conocida repetición del colapso de las últimas reuniones del Comité Permanente en abril del 2014.

    En esta ocasión, se generalizó el desacuerdo sobre las conclusiones del SCCR28 entre los Estados Miembros, y no se limitó al tema de las excepciones para las bibliotecas y archivos, también se interrumpió el progreso hacia un tratado sobre transmisión luego de un intenso debate entre los Estados Miembros sobre cuán avanzadas estaban las discusiones y cuando, si fuera necesario, se programaría una Conferencia Diplomática para finalizar las discusiones del tratado. La imposibilidad de llegar a las conclusiones en las reuniones del Comité Permanente obedece a un patrón general que se ha presentado en muchas reuniones desde el SCCR27, donde los Estados Miembros son aparentemente incapaces de hallar un común entendimiento sobre diversos asuntos de Propiedad Industrial.

    A pesar del decepcionante fin de las discusiones en el SCCR28, las bibliotecas y archivos tuvieron una semana productiva que inició el lunes 30 de junio con un evento paralelo lleno titulado “Keeping Copyright Relevant in the digital environment: libraries, archives and licences” (Manteniendo el derecho de autor relevante en el entorno digital: bibliotecas, archivos y licencias). Los Estados Miembros y las ONG prestaron atención a una serie de ponentes sobre los problemas que enfrentan las bibliotecas y archivos en relación con las licencias de contenido digital o restringir las excepciones y limitaciones internas del derecho de autor.

    Durante la semana de discusiones, dos días se centraron en las excepciones de derecho de autor para las bibliotecas y archivos examinando el enfoque no vinculante de los “principios” propuestos por EE.UU.

    Mientras los Estados Miembros examinaban relativamente de manera constructiva los principios de los EE.UU. en el momento que disponían, reapareció su incapacidad para hacerse cargo de los crecientes desafíos que enfrentan las bibliotecas y archivos en el entorno digital en repetidas veces por parte de países como India, Chile, Uruguay, Brasil, Sudáfrica y Bangladesh. Varios Estados Miembros, incluida la Unión Europea, insistieron que las excepciones internas de derecho de autor y el marco internacional eran suficientes para resolver los problemas expuestos por las bibliotecas y los archivos.

    Irónicamente, en esta misma semana la Comisión de la Unión Europea defendió su marco internacional ante la OMPI. Neelie Kroes, vicepresidente de la Comisión de la Unión Europea y Comisionada de la Agenda Digital, hizo un llamado para la reforma europea de derecho de autor. En su discurso del 2 de julio durante la Conferencia sobre Ciclo de la Información en Ámsterdam, la Comisionada Kroes destacó la naturaleza sin fronteras del acceso a la información en línea.

    “¿Qué implica la reforma pragmática? Significan más posibilidades para acceder al contenido en línea sin fronteras. Significan excepciones más armonizadas, que beneficien a los investigadores, docentes, usuarios y protectores, y para el patrimonio cultural. Significa mayor flexibilidad, por lo que no debemos sostener las mismas discusiones cada cinco años.”

    Aún está por verse la manera cómo se preparan los Estados Miembros para abordar la naturaleza sin fronteras del acceso a la información en las reuniones del Comité Permanente sobre Derecho de Autor y Derechos Conexos en la OMPI. Sin embargo, las bibliotecas y archivos continuarán luchando por soluciones internacionales que satisfagan los servicios en evolución que cada vez más se brindan en una entorno de información global y sin fronteras.

    La siguiente reunión del SCCR tendrá lugar en diciembre del 2014, después de la Asamblea General de la OMPI a celebrarse en septiembre de este mismo año.

    Para más información en inglés:

    Declaración de la IFLA en SCCR28:
    Carta a la Comisión de la Unión Europea, después de SCCR27

    Consulte la versión web en http://www.ifla.org/node/8759

  • Discusión sobre excepciones y limitaciones para bibliotecas y archivos en la OMPI en diciembre de 2013

    El Comité Permanente de Derecho de Autor y Derechos Conexos (SCCR por sus siglas en inglés) de la Organización Mundial de la Propiedad Intelectual (OMPI) está adelantando en un programa de trabajo sobre excepciones y limitaciones para bibliotecas, archivos, la enseñanza y educación, instituciones de investigación y las personas con discapacidades. Chile recomendó a la OMPI revisar estos temas en el 2004. La OMPI inició estudios en sectores específicos desde el 2005.

    En el 2010, en la sesión 21 (SCCR 21) se decidió que se dedicarían sesiones posteriores para actualizar las excepciones y limitaciones al derecho de autor. En diciembre de 2013 (SCCR 26) los estados miembro de la OMPI debatirán nuevamente sobre el tratado de excepciones y limitaciones para bibliotecas y archivos, que se encuentra en borrador. El primer y único tratado internacional aprobado sobre excepciones fue el que beneficiaba a personas con discapacidad visual, celebrado en Marruecos en el 2013; tratado que Colombia se comprometió a implementar.

    La Asociación Internacional de Bibliotecas y Bibliotecólogos (IFLA) realizó una propuesta basada en el informe de Kenneth Crews, comisionado de la OMPI, publicado en 2008. El resultado de dicho informe revela que varios Estados no tienen limitaciones y excepciones para bibliotecas y archivos en sus legislaciones nacionales sobre derecho de autor, o tienen coberturas mínimas. Esto que implica que las bibliotecas no están trabajando con seguridad jurídica, necesaria para cumplir sus funciones en un entorno global y digital sin infringir el derecho de autor.

    Los temas que se mencionan en la propuesta de IFLA son preservación, préstamo bibliotecario, suministro de documentos, acceso a personas discapacitadas, usos justos como educación, investigación, fines personales y privados, obras huérfanas, acceso a obras retiradas del mercado, usos transfronterizos, importación paralela y la obligación a respetar el tratado en licencias y contratos. En Colombia, de estos 11 temas, tenemos carencias en cerca de 8. Nuestra legislación está desactualizada o no hay regulación alguna.

    Este texto se basa en el trabajo de IFLA en la OMPI.

    Otra aproximación a este tema se encuentra en el artículo
    Agenda para el Desarrollo en OMPI, turno para bibliotecas y archivos de Luisa Guzmán.

  • IFLA y el préstamo electrónico de documentos

    Kali, Avatar of the eBook, vía Flickr por kandinski
    Kali, Avatar of the eBook, vía Flickr por kandinski

    ¿Recuerdan la campaña de e-Books en las bibliotecas? Pues bien, el pasado 11 de Mayo de 2012 IFLA publicó un estudio sobre el préstamo de documentos electrónicos. IFLA Releases Background Paper on e-Lending se titula la publicación y puede descargarse el documento en PDF titulado IFLA E-Lending Background Paper.

    En este documento se evidencia la diferencia de intereses entre editores y bibliotecarios. Citan a Mike Shatzkin y su post Libraries and publishers don’t have symmetrical interest in a conversation (Algo como Las bibliotecas y los editores no tienen intereses simétricos en una conversación), donde dice que los editores no toman decisiones morales, sino comerciales. Es cierto, de eso viven. Frases como «The fear is I get one library card and never have to buy a book again» (el temor es que yo tenga una afiliación a la biblioteca y nunca tenga que comprar un libre de nuevo) de Karen Springen, aparecen en el documento.

    El documento debate sobre los posibles modelos de préstamo y algunas preguntas surgen. ¿Una biblioteca debe tener los documentos electrónicos a perpetuidad o debe brindar acceso a los documentos almacenados por las editoriales? Si es así ¿Las editoriales garantizarán la preservación del documento? En este punto los formatos usados, las plataformas de distribución y la arquitectura de información que tengan juegan un rol determinante. ¿Quién puede consultar? ¿Cuántas veces le es permitido leer un documento? ¿Puede descargarse el documento a otro dispositivo de lectura?

    Algunos modelos de préstamo

    Se menciona el modelo de OverDrive, donde un único usuario puede acceder al documento electrónico, tal como ocurre con libros físicos: Si alguien tiene el libro antes que tú, debes esperar a que lo devuelva para que te lo presten. El documento menciona el modelo de micropagos por préstamo (si no estoy mal Sonido Local funcionaba con un modelo similar, donde un artista reproducido más veces en su sistema obtenía un mayor pago que un artista que no era muy escuchado). Otra forma es la de embargo, donde las bibliotecas pagan por un determinado número de préstamos, por ejemplo: Pagas para que un documento pueda ser prestado 100 veces, al llegar a ese límite, vuelves a pagar por otros 100 préstamos.

    El documento cierra la sección titulada «e-Lending» (préstamo electrónico o e-Préstamo) notando que el préstamo de libros electrónicos no está mediado por barreras geográficas, por lo que deben incluise mecanismos para determinar quién accede a qué documento. Esta parte me recuerda nuevamente al párrafo anterior, sobre la arquitectura de información del sistema usado y el problema de Internet a sus inicios mencionado en el libro El Código 2.0 de Lawrence Lessig: El anonimato de la red en sus inicios no nos permitía saber quién hace qué y en dónde.

    ¿Cómo respetar los derechos de los editores, pero también los de los usuarios?
    El documento dice que si bien es cierto los editores deben cuidar su negocio, los usuarios deben conservar su capacidad de citar e incluir fragmentos de una obra en sus trabajos. Juan David en la charla de Radio Pachone lo mencionaba: Puedes ser un productor audiovisual y citar un fragmento de otra película en la tuya. Esa otra película se proyectaría dentro de la tuya y es una cita, pero en lo audiovisual. El documento de IFLA dice que los documentos electrónicos que contienen Medidas de Protección Tecnológica restringen este derecho de los lectores.

    Sobre el préstamo interbibliotecario hay un párrafo: Cuando buscas en tu biblioteca un libro y éste no se encuentra, es posible que la biblioteca tenga convenios con otras a las que puede solicitarle el documento. Ésto es préstamo interbibliotecario. Aparece entonces la preocupación de los editores al notar que una biblioteca puede brindarl a otra una copia idéntica de un documento electrónico con un costo muy cercano a cero. La pregunta del millón es ¿Cómo se pondrán de acuerdo editores y bibliotecarios para mantener el préstamo interbibliotecario en documentos electrónicos? La investigación de IFLA menciona la necesidad de ambas partes a negociar sobre licencias y tecnologías que permitan el beneficio de ambos.

    El documento cierra con la consideración de IFLA de crear una directriz para bibliotecas sobre libros electrónicos (policy guidelines for eBooks in libraries). Menciona que esto puede tardar sobre todo en países en desarrollo. Lo cierto es que estamos en un momento clave, donde debemos planear nuestro futuro.

    Puede que por el momento no tengamos la infraestructura tecnológica, pero si podemos adelantar debates sobre el tema, para tener idea de a dónde queremos llegar. Todos los involucrados se verán afectados, desde el autor hasta el lector, pasando por todos los intermediarios que incluyen editores y bibliotecas.

  • Comentarios a la ley 1520 de 2012 por un bibliotecario

    Stuart Hamilton (su twitter es @IFLASPA, Director de Policy & Advocacy de IFLA habla sobre cómo leyes sobre propiedad intelectual, en este caso particular ACTA, podría afectar a las bibliotecas y a los bibliotecólogos; por ende, a la ciudadanía y los usuarios de estas instituciones encargadas de brindar acceso a información. Para empezar: ACTA no afecta a los colombianos, pero en Colombia, leyes como la 1520 de 2012 (conocida como Ley Lleras 2 o Ley del TLC) son el tipo de leyes que regularían propiedad intelectual en internet.

    A continuación estan mis notas de la traducción del video. No son textuales, pero contienen a mi juicio la escencia de las preocupaciones de IFLA. Traduje «derecho de autor» por «copyright» para ajustarlo al español:

    …las bibliotecas estan conectadas a sistemas de protección de derechos de autor nacionales e internacionales. Cumplimos un importante rol en hacer accesible y preservar la información que está protegida, como la que se encuentra en dominio público.

    En este contexto, IFLA entiende y respeta el rol que el derecho de autor juega en informar, crear y diseminar (información) alrededor del mundo y nuestros miembros hacen énfasis en la importancia de hacer respetar estos principios y regulaciones. Así, los miembros de IFLA entienden que el derecho de autor debe proveer un balance entre las necesidades de información de la comunidad en general y los beneficios comerciales de los creadores y proveedores de contenidos. Lo que nos lleva a ACTA.

    IFLA considera que la discusión de este tipo de acuerdos que pueden afectar el acceso a información de manera global deben realizarse en la OMPI, donde es posible asegurar la participación de todos los implicados. La falta de transparencia a lo largo de la creación de este acuerdo genera desconfianza por aquellos que no fueron consultados desde el mismo génesis del acuerdo. Como dijo el senador Ron Wyden de los Estados Unidos: Cuando acuerdos internacionales como ACTA se conciben y se contruyen en secreto es difícil argumentar que representan el interés del público en general.

    El segundo punto, menciona Don Stuart, es la dificultad técnica que implicaría recolectar información de los usuarios para saber el tipo de actividad que realizan en internet, por ejemplo vigilando quién descarga contenido ilegal. Dice que si esta responsabilidad recae sobre los intermediarios como las bibliotecas, requerirían una gran inversión en infraestructura para rastrear esta información.

    Finalmente, queremos llamar la atención en los esfuerzos anti piratería que desconocen que el derecho de autor debe ser balanceado. 15 leyes anti piratería se han promulgado en los pasados 30 años en los Estados Unidos y los plazos de protección se han extendido a lo largo de los años, creando un ambiente de poca flexibilidad en el derecho de autor particularmente en la era digital.

    Si bien ACTA no aplica para Colombia y este llamado de IFLA se hace al Parlamento Europeo, creo que hay puntos similares en la manera de proceder del Gobierno colombiano frente a la reciente aprobación de la Ley 1520 de 2012. Aquí mis comentarios:

    Los bibliotecarios entienden y respetan el derecho de autor. Nuestra misión como bibliotecarios es preservar y permitir el acceso a la información. No estamos buscando lucro por permitir el acceso a la información. Mi conclusión en una pasada presentación sobre ética de la información es que el acceso a la información es la herramienta de los bibliotecarios para formar ciudadanía. No nos interesa beneficiarnos de los autores a costa de su trabajo. Nuestra misión es diferente.

    En el proyecto de ley 201 de 2012 (o Ley Lleras 2, también conocida como Ley TLC) no se contó con la participación de todos los involucrados en el acceso a la información a través de internet. Al igual que en el pasado proyecto de ley 241 de 2011 (primera Ley Lleras). Para ACTA, IFLA sugiere que esta discusión se realice en la Organización Mundial de la Propiedad Intelectual para garantizar su transparencia. No sé en el caso colombiano qué organismo debería hacerse cargo para garantizar la transparencia, ya que la Dirección Nacional de Derecho de Autor no realizó ningún tipo de convocatoria, que vengo esperando desde el pasado 17 de Febrero de 2011 y cuya «discusión» se realizó una vez se radicó el primer Proyecto de Ley por Germán Vargas Lleras. En ese caso parecería que se requiere un organismo conjunto que involucre la protección de los autores, pero que también tenga en cuenta a los usuarios. ¿Podría ser la Biblioteca Nacional? ¿Tal vez la Luis Ángel Arango? ¿Se les ocurre alguna otra entidad?

    Por otra parte me sentiría mucho más tranquilo, si discusiones como la definición de lucro se llevan a cabo en este tipo de organizaciones donde se invita a debatir a todos los interesados, si puede realizarse en un espacio neutral y transparente. En una discusión que tuve con Felipe García Pineda, Director General de la Dirección Nacional de Derecho de Autor me decía que pedir acceso para obras protegidas sin el permiso del autor era una visión miope del problema. Mi respuesta fue que radicar el proyecto de ley sin la visión de los usuarios también lo era.

    El segundo punto habla de un punto que en estos momentos no nos preocupa mucho porque la Ley 1520 de 2012 no menciona. Si se hubiera aprobado la pasada Ley Lleras si hubiera sido un problema y es la dificultad que tenían las ISP para implementar medidas para obtener información de los usuarios infractores dentro de la biblioteca. En este caso la adaptación a nuestra ley creo que sería referente a las medidas de protección tecnológica: ¿Estan las bibliotecas en capacidad de desarrollar mecanismos que quiten estos candados digitales para que hagan uso de las excepciones y limitaciones que la ley le permite? ¿Son los proveedores (disqueras, editoriales, etc.) quienes deben ofrecer a las bibliotecas las llaves a sus candados o deben tener las bibliotecas un equipo técnico que se dedique a hackear estos seguros anti copia? Si las bibliotecas tienen problemas financieros para adquirir documentos ¿Es justo que su presupuesto deba invertirse en hallar la llave para que dichos contenidos se puedan copiar, por ejemplo, para preservarlos? Según entiendo es una ventaja que esta nueva ley haya permitido mediante las excepciones y limitaciones que se desbloqueen documentos en caso de adquisición. ¿Es suficiente el que sólo se permita el desbloqueo para la adquisición?

    El tercer punto si hace referencia a la ley en cuestión, particularmente en el punto donde extiende la protección a obras realizadas por personas jurídicas de 50 a 70 años. Como Stuart Hamilton menciona, se ha hecho todo para proteger a los autores pero ¿Quién protege a los usuarios? ¿Quien se encarga de mantener un sano dominio público, que de hecho no esta mal?

    En una pasada discusión con Jhon González sobre representatividad de los bibliotecarios se evidencia la nula presencia de agremiaciones colombianas con opinión sobre estos temas. La representatividad me parece un tema preocupante porque en realidad se legisla sobre internet y muy pocos ciudadanos colombianos pueden participar en las discusiones que deberían darse para permitir unas leyes equilibradas. Por eso me parece urgente la creación de dicho organismo que permita el debate entre autores y usuarios para llegar a acuerdos.

    No es que quiera todo gratis, es que quiero una ley justa. Desde hace bastante siento que se debía hacer una actualización a la ley de derecho de autor, pero me parece que el proceder no fue el más adecuado. Tengo más comentarios, pero menciono estos a propósito del llamado que hace Stuart Hamilton de IFLA sobre ACTA.

  • Transmitiendo desde IFLA 2010 // Publicando en múltiples servicios

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    Justo ahora estoy en IFLA 2010. Hay mucho información en todos lados, trataré de capturar lo que más pueda y luego espero redactar algo más conciso. Mientras recopilaré fotos en mi flickr, algunos videos en mi Youtube y escribiré en mi Twitter para llevar notas del evento. Estoy haciendo algunos videos sobre la experiencia de viajar a Europa a este evento. Aquí el primero:
    [youtube:http://www.youtube.com/watch?v=7-nK0qQoEdQ&feature=related]