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  • Comentarios al proyecto de ley de derecho de autor de 2016

    El pasado 22 de Septiembre de 2016 el Ministerio de Comercio, Industria y Turismo cerró la recepción de comentarios a un proyecto de ley que actualiza el derecho de autor en Colombia. Este proyecto de ley es particularmente interesante para las bibliotecas, archivos, museos y otras instituciones relacionadas con la cultura y la educación, porque actualiza el derecho de autor debido a que Internet modificó nuestras prácticas, pero la legislación colombiana no se ha actualizado del todo.

    Si se va a reforzar la protección de los titulares del derecho de autor ¿por qué no también fortalecer las excepciones y limitaciones para usuarios y lectores?

    ¿En qué consiste la actualización?

    Este proyecto de ley responde al compromiso de Colombia frente a Estados Unidos en su Tratado de Libre Comercio, capítulo 16. Hay varios temas a regular y en esta ocasión, el gobierno le vuelve a apostar a la regulación de Medidas de Protección Tecnológicas. Como puede verse en esta cronología, la propuesta que quedaría pendiente es la de Proveedores de Servicios de Internet. Allí aparecen excepciones y limitaciones, que realmente no son compromisos con el Tratado de Libre Comercio, pero si se va a reforzar la protección de los titulares del derecho de autor ¿por qué no también fortalecer las excepciones y limitaciones para usuarios y lectores?

    En términos generales se actualiza lo relacionado con:

    • Medidas de protección tecnológica
    • Radiodifusión
    • Retransmisión de señales por internet
    • Actualización a los derechos conexos
    • Aumento de plazos de protección para personas jurídicas, que de 50 años pasan a 70, para entrar a dominio público.
    • Excepciones y limitaciones para bibliotecas, archivos e instituciones de educación.

    La actualización a la ley es necesaria, pero al haber muchas partes involucradas, todas las partes deben trabajar mancomunadamente para crear una ley justa e incluyente.

    ¿Cuáles son los comentarios a este proyecto de ley?

    Estuvimos ocupados trabajando en unos comentarios específicos desde el sector bibliotecario. Sin embargo, estudiando la propuesta con más calma, entendiendo cada punto y buscando ejemplos para cada caso, hicimos unos comentarios en una versión revisada y ampliada.

    Este proyecto de ley nos toma en un momento interesante: desde el sector bibliotecario adelantamos una investigación sobre las necesidades de actualización de a norma de derecho de autor. En términos generales podemos resumir así:

    • Este proyecto podría afectar negativamente a unidades de información digitales (bibliotecas digitales, museos vituales y similares) en lo relacionado con streaming de contenidos.
    • Se aumentan los plazos de protección para personas jurídicas. Es decir, los plazos de protección no quedarán en 50 años luego de la publicación de una obra sino en 70.
    • Se regulan las medidas de protección tecnológicas, es decir los candados digitales que impiden que una obra se pueda copiar. Este proyecto contempla que las bibliotecas y archivos puedan romper dicho candado digital, pero lo que pueden hacer estas instituciones es muy poco útil y se requiere una revisión más profunda.
    • Se incluyen algunas excepciones y limitaciones para bibliotecas y archivos, pero hay avances importantes en el estudio de necesidades de estas instituciones. Ojo, esto no implica que se dañen los negocios de los titulares del derecho de autor, ya que en otras latitudes ya se hizo, como en Polonia y como lo mencionamos, en Colombia hay más datos de las excepciones que necesitamos.
    • Si se refuerza la protección de los titulares del derecho de autor, que se refuercen las excepciones y limitaciones y se incluya una cláusula abierta.
    • Se elimina una limitación al derecho a la reproducción que tenía la ley 23 de 1982 (artículos 58 a 71). Lo que deberíamos hacer es actualizarla para que dicha limitación incluya lo digital.
    • Solicitamos la participación de entidades que representen a los sectores bibliotecológicos, archivísticos y museográficos del país en los espacios de decisión en derecho de autor, para que se incluyan estas perspectivas en los debates que se realicen. Por ejemplo que el Consejo Nacional de Bibliotecología esté presente en espacios como la Comisión Intersectorial de Propiedad Intelectual (CIPI) con un rol mucho más preponderante, al igual que la Biblioteca Nacional de Colombia y no sólo a través de los ministerios del que hacen parte.

    ¿Qué viene ahora?

    Luego de recibir los comentarios, el Ministerio de Comercio, Industria y Turismo debería dar una respuesta no sólo a éste, sino a todos los comentarios que recibió. La última vez que algo así ocurrió fue en las mesas de trabajo de 2013. En ese entonces se suponía que la respuesta iba a tardar apenas unas semanas; tres años después las publicaron con el documento de proyecto de ley.

    Se hace evidente que hace falta una metodología para recibir, procesar y dar respuesta a los comentarios de la sociedad civil. En nuestros comentarios, solicitamos se informara sobre esta metodología. Tener una metodología te permite tener cierta claridad de los pasos a seguir, aporta a la transparencia del proceso y elimina la aleatoriedad en la toma de decisiones. No es una tarea fácil, pero si muy necesaria.

    Por el momento podríamos simplemente esperar el pronunciamiento del Ministerio de Comercio, Industria y Turismo, sin embargo creo que una posición más activa requiere informar a los involucrados, generar debates y aprender sobre las implicaciones del proyecto de ley en el país. Una muy buena iniciativa fue la del Comentatón de RedPaTodos. Por otro lado la generación de mayores consensos en gremios como el bibliotecario, archivístico, museológico o académico podrían ser útiles para debates mucho más precisos. Creo que es un desatino buscar impedir la actualización de la ley de derecho de autor porque es necesaria. Lo que hay que hacer es trabajar porque la norma tenga una actualización justa e incluyente.

    Creo que es un desatino buscar impedir la actualización de la ley de derecho de autor porque es necesaria. Lo que hay que hacer es trabajar porque la norma tenga una actualización justa e incluyente.

    Descargue el documento con los comentarios

    En este post publicamos el documento con la versión revisada y aumentada.

  • Actualización de la cronología de proyectos de ley que modifican el derecho de autor en Colombia

    Hace algunos años hice una cronología de los proyectos de ley que buscan actualizar el derecho de autor en Colombia o las conocidas «Ley Lleras». Como publicó el Ministerio de Comercio, Industria y Turismo, hubo un movimiento en el cronograma: El Ministerio abrió la posibilidad de recibir comentarios a un nuevo proyecto de ley, que responde a la regulación de medidas de protección tecnológica, aunque incluye algunas excepciones y limitaciones al derecho de autor.

    Quienes llevan las cuentas, dicen que esta es la Ley Lleras 5. Cada barra azul representa una «versión» de la Ley Lleras. Incluí excepciones que tienen que ver con personas en situación de discapacidad y el Tratado de Marrakech, por ser hitos importantes. Vale la pena mencionar que es una muy buena oportunidad para que las leyes en derecho de autor referentes a bibliotecas, archivos, museos e instituciones de educación incluyan excepciones y limitaciones, algo necesario en un mundo que cambió con Internet.

    La cronología actualizada

    Actualización de la cronología de propuestas de ley de derecho de autor en Colombia
    Actualización de la cronología de propuestas de ley de derecho de autor en Colombia
  • La biblioteca del futuro y la conexión de la otra mitad

    ¿Cómo es la biblioteca del futuro? en el blog de Kristīne Pabērza encontré este video:

    Es un video del 2009. Sin embargo hace una referencia interesante al acceso a la información, a propósito de la Agenda 2030 y los Objetivos de Desarrollo Sostenible. Uno de los retos de las bibliotecas es lograr que la otra mitad de personas estén en línea. ¿Cuál crees que es la labor de las bibliotecas en la actualidad?

    Nota

    Tengo varias cosas pendientes: Terminar el reto de #30dias30bibliotecas, escribir sobre el Congreso Mundial de IFLA, el Programa de Liderazgo (en el que estoy con Kristīne) y la actualización al derecho de autor en Colombia. Espero ponerme al día cuanto antes, pero ojalá le presten atención a la actualización de derecho de autor, que puede definir buena parte del futuro digital de las bibliotecas colombianas. Creo que estaremos publicando cosas del tema en Conector.

  • Algunos materiales del Congreso Mundial de IFLA 2016

    Materiales del Congreso de IFLA
    Materiales del Congreso de IFLA

    Desde hace algunos años IFLA está usando una aplicación, con el programa del evento.

  • Las implicaciones de la declaración de inexequibilidad del proyecto de ley que buscaba actualizar la ley del bibliotecólogo

    El pasado 27 de abril de 2016, la Corte Constitucional de Colombia declaró inexequible el proyecto de ley que adoptaba el código de ética de la profesión de bibliotecología y modificaba la ley 11 de 1979. Aquí el comunicado de la Corte Constitucional. ¿De qué se trataba el proyecto de ley? ¿Qué implicaciones tiene esta declaración? ¿Qué viene ahora?

    Hago una revisión respetuosa de las opciones que tiene el Consejo Nacional de Bibliotecología y formulo unas preguntas, como un profesional en el área que quiere implicarse en el proceso y de ser posible aportar en lo que se necesite.

    (más…)
  • Día 10: Biblioteca pública Manuel María Aya Díaz #30dias30bibliotecas

    Esta publicación hace parte del reto 30 días, 30 bibliotecas. En esta ocasión dimos un salto a un municipio cercano a la capital del país: Fusagasugá.

    La ubicación

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    Fusagasugá está ubicada a 56 kilómetros al sur occidente de Bogotá. es la ciudad capital de la provincia del Sumapaz, en el departamento de Cundinamarca.

    La visita

    La visita fue mas que merecida. Esta biblioteca municipal la conocí y visite por primera vez a finales del siglo XX. En ese momento vivía en este municipio y era una fuente de información para resolver las tareas de mis clases de bachillerato. Unos años después me mude a Bogotá y nunca mas volví a pisar esta biblioteca. Por una vista ocasional a la ciudad, y aprovechando el motivo de estas publicaciones, resolví volver a consultar esta biblioteca y contrastar esta experiencia con mis recuerdos.

    Poco antes de llegar, durante el día de la visita, estuve rememorando la ultima vez que estuve consultando libros. Recordaba que la biblioteca se ubicaba en un segundo piso, en una construcción ubicada junto a la casa de la cultura de Fusagasugá. La consulta, en ese entonces, se hacia a través de la bibliotecaria, una señora mayor y amable; la colección era cerrada y con un turno se entregaban los libros. Creo que lo último que consulte fue un atlas.

    Cuando llegue a la casa de la cultura vi varios cambios, así que pregunte si la biblioteca todavía funcionaba en ese lugar. Cuando llegue al edificio note que la vía de acceso había cambiado. La biblioteca seguía en el segundo piso. Antes de llegar a las escaleras se encontraba un punto de Vive Digital. Al subir las escaleras fue muy evidente el cambio de la biblioteca, mis recuerdos no coincidían para nada con lo que estaba viendo.

    Entrada de la biblioteca municipal
    Entrada de la biblioteca municipal.

    La primera impresión de la visita fue muy buena, espacios amplios, colección abierta, un lugar para exposiciones, sala de lectura, de computo y un pequeño auditorio en donde estaban presentando un película infantil. Me acerque al lugar en donde se encontraba el bibliotecario, Mauricio, nos saludamos y luego me pregunto si podía ayudarme en algo, si era mi primera vez en la biblioteca. Le dije que estaba de visita y que mi ultima visita fue hace 16 años, algo le causo gracia y se acerco. Me pidió diligencia un formulario, un registro de visita. Cuando termine, me hizo un recorrido por el lugar.

    Mauricio se tomo su tiempo para explicarme la distribución de la biblioteca, donde estaban localizadas las distintas áreas del conocimiento y la sección de literatura, las mesas de lectura, el auditorio y una breve indicación de los servicios que prestan, particularmente los relacionados con el préstamo y el uso de computadores. También menciono servicios adicionales como talleres de lectura y escritura.

    Mientas me mostraba el espacio de lectura, vimos a un niño atrincherado junto a un ventanal, con sus cuadernos, mochila y algunos comestibles hablando por celular, lamentándose porque estaban presentando una de sus películas favoritas, y el ahí haciendo tareas. Cuando termino su llamada siguió concentrado en lo que estaba haciendo.

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    Foto: Leonardo Ramírez Ordóñez

    Luego de esta presentación Mauricio siguió hacia su escritorio y me dejo en libertad de explorar los libros que quisiera, recomendando dejar los libros sobre la mesa después de consultarlos, para que él o una de las personas que se encontraba prestando su servicio social en el lugar los ubicara en el orden correcto.

    Recorriendo los estantes por mi cuenta pude ver que la colección de literatura tenia los ejemplares mas antiguos, algunas ediciones que nunca había visto de autores colombianos y un buen numero de novela gráfica. También un espacio dedicado a la literatura infantil muy llamativo, por cierto. Junto a los libros de literatura infantil encontré una espacio de exposición. La muestra estaba compuesta por fotografías y textos. La primera imagen que llamo mi atención fue la de una persona en un ambiente de discoteca, algún recuerdo llego a mi y al ver los textos note que esa y todas las demás historias trataban mitos y leyendas de Fusagasugá, historias que nos contábamos con otros compañeros de colegio para asustarnos.

    La muestra hacia parte de un taller de fotografía y estaba basado en un par de publicaciones de hace unos años en donde se recopilaron y publicaron estas historias en el marco de un proyecto de recuperación de memoria oral de la región.

    Un poco de contexto

    La biblioteca esta ubicada en un sector de la ciudad aledaño a varios colegios de la ciudad. Lleva el nombre el ciudadano Manuel María Aya Díaz descendiente de la familia Aya, reconocida desde tiempos coloniales en la región. Manuel Aya Díaz paso sus últimos días en París, al morir destino su herencia a la construcción de una fundación educativa que lleva su nombre y su biblioteca.

    Según el Sistema Nacional de Información Cultural (SINIC), fue constituida en 1992. Es una biblioteca publica municipal y esta vinculada a la Red Nacional de Bibliotecas Publicas.

    Sobre el origen de la biblioteca publica de la región, se dice que Jorge Tadeo Lozano, dueño de la hacienda Chinauta, en donde frecuentaron científicos como Mutis, Humboldt y Caldas y otras personalidades de la época. Esto pudo haber sido un motivo que el fundara la primer biblioteca publica en la casona conocida, actualmente, como el Viejo palacio municipal.

    Los alrededores de la biblioteca

    En los alrededores inmediatos se encuentra la quinta La Tulipana, edificación republicana construida en el siglo XX, es sede de la actividad cultural del municipio. En el mismo terreno hay una sede del SENA y una amplia zona verde.

    En los alrededores inmediatos se encuentran las sedes del colegio Carlos Lozano y Lozano, que van desde el jardín infantil, la escuela básica primaria y bachillerato. En las mismas instalaciones funciona una sede de la Universidad INCCA. En la misma manzana se encuentra el colegio Fundación Manuel Aya y frente a este colegio una frutería excelente.

    Las fotos

  • Día 9: Biblioteca Luis Ángel Arango #30dias30bibliotecas

    Esta publicación hace parte del reto 30 días, 30 bibliotecas.

    La ubicación

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    La visita

    En esta biblioteca me hice lector. Recuerdo que solía venir todos los lunes en la mañana a dejar un libro y sacar uno nuevo para devolverlo el siguiente lunes en la mañana.

    Algo que me sorprende de esta biblioteca es la impresionante colección que tiene. Es muy probable que no encuentres un libro a la venta, que no lo encuentres en muchas bibliotecas, pero seguro eso que buscas, lo encuentras aquí. Documentos como el de Gregorio Peces-Barba que sirvió como base para mi trabajo de maestría, lo encontré aquí.

    Es muy probable que no encuentres un libro a la venta, que no lo encuentres en muchas bibliotecas, pero seguro eso que buscas, lo encuentras aquí

    Leí casi todos los libros de Charles Bukowski aquí, también los de Efraim Medina Reyes difíciles de conseguir, hace como 12 años. Solía venir al tercer o cuarto piso a leer novelas. Engancharme a estos libros fue lo que me convirtió en lector e incidió en mi formación como bibliotecólogo y profesional de ciencia de la información. Eso se lo debo a esta biblioteca.

    A decir verdad no he ido a los conciertos que ofrece la biblioteca, pero por lo general hay una muy buena oferta cultural. Si he asistido a charlas, conferencias y conversatorios. También he visto varias de las exposiciones que realiza la biblioteca.

    En esta ocasión quise trabajar en uno de los pupitres que se encuentran afuera de las salas de lectura. Tengo una maleta que no quería dejar en los casilleros. Hay una muy buena iluminación y es una biblioteca que no importa a qué hora la visites, siempre hay alguien leyendo.

    Biblioteca Luis Ángel Arango
    Biblioteca Luis Ángel Arango

    Hay bastante gente en la biblioteca y puedes encontrarte de todo. Ya es famosa una señora que suele visitar la biblioteca con papel aluminio en la cabeza, para que no lean su pensamiento. En una visita anterior a esta, recuerdo que subí a un ascensor con Leonardo y un hombre bastante corpulento, quien empezó a insultarme luego de que las puertas se cerraran. Alegaba que debía cortarme el cabello. «Con esa barba y el pelo largo, parece mitad hombre y mitad mujer» me decía. – ¿Por qué debería cortarme el cabello? le pregunté. – ¡Porque yo soy el líder! dijo. Nos bajamos del ascensor y cada uno siguió su camino, él hablando solo.

    «Con esa barba y el pelo largo, parece mitad hombre y mitad mujer» me decía. – ¿Por qué debería cortarme el cabello? le pregunté. – ¡Porque yo soy el líder! dijo.

    Estos usuarios variopintos puede que den una muy buena idea de cómo es Colombia.

    Un poco de contexto

    Esta biblioteca empezó siendo una biblioteca especializada en economía, para los economistas del Banco de la República, entidad a cargo de la biblioteca. Actualmente funciona como biblioteca pública y responde a necesidades de una muy amplia comunidad, que la tiene como referencia por su larga trayectoria en la ciudad.

    Los alrededores de la biblioteca

    La Luis Ángel Arango funciona en la Candelaria, el sector colonial de Bogotá. En frente se encuentra el Museo de la Moneda y la donación de Fernando Botero, donde pueden encontrarse pinturas y esculturas de grandes artistas.

    Por esa misma cuadra hay una gran cantidad de restaurantes, cafés y chocolaterías. Al costado oriental de la biblioteca se encuentra el Colegio Agustiniano de San Nicolás, donde estudié en mis primeros años de escuela.

    Muy cerca queda la Universidad de La Salle y el Teatro Colón. En la calle pueden verse algunos carritos donde venden obleas. Es curioso ver que casi todos los carritos ahora se llaman «Obleas Mick Jagger», luego del concierto de los Rolling Stones en Bogotá, donde Jagger probó las obleas.

    Las fotos

  • Día 8: Biblioteca de la Universidad de La Salle, sede Candelaria #30dias30bibliotecas

    Esta publicación hace parte del reto 30 días, 30 bibliotecas. Hice la visita mientras están en vacaciones en esta universidad, por lo que estaba bastante vacía. Al parecer si no tienes vinculación con la Universidad es más complicado ingresar a esta biblioteca.

    La ubicación

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    La visita

    Estuve averiguando si podía acceder a la biblioteca sin estar vinculado a ella. Al parecer es más fácil acceder a esta biblioteca si estudias y hay una institución que te presente. Para personas sin ningún tipo de vinculación a la universidad podría ser más complicado entrar.

    Estudié en un colegio lasallista. Recuerdo que en las izadas de bandera, el hermano Pedro recordaba El Bogotazo y cómo lo vivió. Siempre nos contaba que la turba incendió primero los pisos superiores del colegio, para ir bajando e incenciando el resto. A decir verdad no sé si el incendio del que hablaba el hermano Pedro se dio en esta sede, sin embargo da cuenta de la tradición que tienen los hermanos de La Salle en Bogotá (y Colombia).

    ¿Cuántos libros se perderían en ese incendio? ¿Cuánta información perdió la biblioteca de la Universidad de La Salle (si es que la perdió) por estos eventos de violencia del país?

    Un poco de contexto

    Esta biblioteca universitaria es vecina del Museo de La Salle. Tiene colecciones patrimoniales (o en proceso de serlo) donadas por hermanos de la comunidad de La Salle.

    Los alrededores de la biblioteca

    La biblioteca se encuentra a unas pocas cuadras de la Biblioteca Luis Ángel Arango, en La Candelaria. Es un sitio bastante turístico al estar en la parte colonial de la ciudad.

    Imagino que al ser estudiante de La Salle hay muy buenas cosas que hacer. Además dicen que en la Candelaria hay fantasmas. Las historias son algo interesante a conocer. Esta biblioteca queda particularmente cerca del Chorro de Quevedo, lugar donde se supone nació Bogotá, con una iglesia y doce chozas alrededor.

    Esta biblioteca queda en una zona universitaria, por lo que fácilmente pueden encontrarse muchas otras bibliotecas universitarias alrededor.

    Las fotos

     

  • Día 7: Biblioteca y fonoteca de la Casa de Poesía Silva #30dias30bibliotecas

    Esta publicación hace parte del reto 30 días, 30 bibliotecas. Fui a visitarla para cubrirme de la lluvia. Había estado antes en el auditorio, pero no conocía toda la Casa de Poesía. Iba a aprovechar esta ocasión para darme una vuelta sin afanes.

    La ubicación

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    La visita

    Llegué mientras una persona estaba contándoles a otros la historia de la casa. José Asunción Silva le pidió a un médico que le marcara exactamente la ubicación del corazón, para luego darse un disparo en el pecho. «José Asunción Silva es el del billete de $5.000» aclaró.

    En la historia, contaron sobre las degradaciones que se hicieron al cadáver del poeta, al suicidarse en una sociedad ultra católica. Mencionó que le pusieron cal en su rostro, para desfigurarlo y que por eso la escultura del patio de la Casa, donde el rostro se ve desfigurado.

    Busto en el patio de la Casa de Poesía Silva
    Busto en el patio de la Casa de Poesía Silva

    Habían algunas fotografías de Elvira, la hermana de José Asunción Silva. Un grupo de extranjeros llegaron y una guía es contaba la historia de la casa en inglés.

    Esta es una casa típica colombiana. José Asunción Silva se suicidó por una pena de amor, ¿adivinen por quien? ¡Por su hermana!

    Un «¡Woooow!» muy pronunciado se escuchó entre los visitantes extranjeros.

    Luego pasé por la Fonoteca HJCK. Allí escuché poesía de Raúl Gómez Jattin de su propia voz. Fue una experiencia que nunca antes había tenido. El sitio resulta bastante agradable y podía verse a varias personas que venían tímidamente a saber cómo funcionaba la fonoteca. Conmigo la bibliotecaria fue muy amable, pero escuché un comentario de alguien que se quejaba porque no conocía el servicio y se sintió regañada. «¿Así cómo esperan que la gente consulte la biblioteca?» decía mientras refunfuñaba.

    Me gustaba de la poesía de Jattin que rememoraba algunas de sus rumbas. Se reía y hacía reír al público. Era una poesía vibrante lo que escuchaba.

    Luego fui a la librería a comprar algunas cosas de recuerdo. Compré una postal de Elvira, para tenerla entre las fotografías que colecciono en mi casa.

    Un poco de contexto

    La casa iba a ser convertida en un parqueadero. Fue recuperada y en 1995 fue declarada monumento nacional. Aquí está su sitio web y puede verse allí también el catálogo de la biblioteca. En la Biblioteca Nacional de Colombia, en la Biblioteca Básica de Cultura Colombiana puede conseguirse De sobremesa, para descargar en ePub o en PDF por si quieres imprimirlo. En la versión HTML puede leerse en línea y comentarse.

    El catálogo de la biblioteca usa Isis. Tanto el catálogo como el computador de la casa se me hicieron piezas únicas, por lo viejas que son. No pensé que fuera a ver en vida un catálogo en Isis, pero estuvo muy bien encontrarlo. Pensaba igual que en otras instituciones ni siquiera hay un catálogo

    Computador con el catálogo de la Biblioteca de la Casa de Poesía Silva
    Computador con el catálogo de la Biblioteca de la Casa de Poesía Silva

    Alguien me dijo que la biblioteca estaba descuidada, que había tenido mejores años. Por mi parte era la primera vez que la visitaba a fondo y me pareció muy bien, pero es verdad que siempre tienes la oportundad de estar mejor. A mi me pareció uno de los sitios más agradables de los que he visitado en este reto. Además me recordó lo que Martha Nussbaum decía sobre la educación artística. Nos estamos tecnificando al punto que estamos perdiendo la educación en humanidades. Esta biblioteca es un excelente sitio para conectarse con ese aspecto de la vida.

    Los alrededores de la biblioteca

    La biblioteca se encuentra en La Candelaria, la zona colonial de Bogotá. Es un atractivo turístico de Bogotá y hay de todo alrededor: Cafés, restaurantes y varias universidades. Es un sitio que particularmente me parece muy agradable.

    Las fotos

  • Día 6: BECMA, la Biblioteca Especializada en Cine y Medios Audiovisuales de la Cinemateca #30dias30bibliotecas

    Esta publicación hace parte del reto 30 días, 30 bibliotecas.

    La ubicación

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    La visita

    Un poco antes de entrar me topé con tres ex compañeros de trabajo de la Biblioteca Nacional. Lyda, uno de ellos, me comentó que el bibliotecólogo a cargo se llama Juan Carlos. Si no estoy mal, la misma Lyda trabajó en la BECMA.

    Fui a visitar esta biblioteca, de la cual me enteré por las letras doradas de la puerta. Por lo general la puerta está cerrada, lo que te hace dudar de su disponibilidad. Al golpear, le pregunté al celador, quien me preguntó si venía de alguna institución en particular. Esta pregunta se ha hecho frecuente en este reto.

    «No, de ninguna. Soy un simple ciudadano que quiere consultar la biblioteca» es lo que suelo responder. Lo que genera cierta extrañeza. Como también se ha vuelto más o menos rutinario me piden registrar tableta o computadores portátiles que lleve conmigo.

    La biblioteca queda en el sexto piso. En términos de accesibilidad creo que podrían haber problemas. Si quisiera salir con mi abuela (que usa una silla de ruedas y salimos con cierta frecuencia), seis pisos sin ascensor son mucho más de lo que podría subir ella, o cualquiera en una situación donde tus piernas requieran ciertas ayudas.

    Al subir me encontré con un proyector. Eso me emocionó. Le tomé una foto a la parte de atrás, porque la ubicación no ayuda mucho.

    Proyector en las escaleras del BECMA
    Proyector en las escaleras del BECMA
    Más arriba encontré un afiche de La Mencha, que me emocionó mucho más. Ya vas percibiendo el aroma del cine y la televisión de lo que podrías encontrar en esta biblioteca.

    Afiche de La Mencha, en las escaleras para llegar a la biblioteca de la Cinemateca
    Afiche de La Mencha, en las escaleras para llegar a la biblioteca de la Cinemateca
    Al llegar estaba Juan Carlos, detrás de él otra persona y en la mesa un grupo que discutía vehementemente sobre un evento o algo por el estilo. Cuando le comenté que quería conocer sobre la biblioteca, Juan Carlos le pidió a Angélica (la persona tras él) que me la enseñara.

    Hay un grupo de 5 personas trabajando. Hablan sobre soportes, técnica, subjetividades y publicación en blog, revistas… parece una discusión muy interesante. Parecía que estaban preparando la preparación de un evento. Una cátedra en cine o algo así. Pintaba muy bien y el que ellos estuvieran ahí daba cuenta de la apropiación que debe tener la comunidad cineasta y cinéfila del lugar.

    Angélica me comentó que esta biblioteca tiene cerca de 30 años. Se debe no a una persona, sino a un grupo de personas que movían el cine en la capital de Colombia. Ha tenido sus altos y bajos, pero ahora tiene cierta continuidad.

    Ella también me comentó que están haciendo catalogación analítica de las revistas, es decir que describen no sólo la revista como un todo, sino que catalogan cada uno de sus artículos para que pueda recuperarse. Es bastante trabajo para una sola persona, pensé.

    El sitio es bastante chico y se ve saturado por la colección, eso se contrasta con la solicitud de un nuevo espacio para la Cinemateca. Imagino que más espacio les podría venir muy bien, sin embargo es un sitio muy agradable para estar. Tienen películas en diversos formatos y una de las cabinas tiene VHS, mientras que la otra es para discos ópticos (DVDs o CDs).

    Un poco de contexto

    La biblioteca ofrece únicamente consulta en sala. Hay un par de cabinas para 3 personas para poder ver las películas u otros materiales que ofrece la Cinemateca. Tienen una colección de los carteles de las películas, que me pareció muy interesante consultar a fondo más adelante. Siempre me han gustado los afiches de las películas, sobre todo porque antes eran dibujantes quienes los hacían. Ahora simplemente imprimes en gran formato fotografías o imágenes pre diseñadas. Le daba mucho mérito a los dibujantes.

    Angélica me envió un correo con el catálogo, que está en el software francés PMB pero lo pasarán a Koha; También me envió el sitio web de la Cinemateca Distrital con su programación, publicaciones digitales, convocatorias, y demás información; las publicaciones de la Cinemateca Distrital, la cuenta de Facebook de la Cinemateca y de BECMA y la cuenta de Twitter de la cinemateca.

    Los alrededores de la biblioteca

    La BECMA se encuentra en el Teatro Jorge Eliecer Gaitán, muy cerca de la Astroteca del Planetario y la Biblioteca Nacional de Colombia. Sobre la carrera séptima hay una enorme población flotante, es decir gente que transita sobre ese lugar, pero que no viven en él.

    Hay una gran oferta gastronómica, cultural y turística. Particularmente me gusta que una cuadra hacia el sur, sobre la carrera séptima, se encuentra la Pastelería La Florida. Este pechito se hizo fuerte a punta del pan de La Florida. Mi abuela materna es pastelera y panadera y eso hizo que me gustaran únicamente los mejores panes y pasteles. Es un poco triste ver con desdén muchos de los panes que hay en la ciudad, pero cuando encuentras algo bien hecho, lo disfrutas mucho. Nunca probaría una empanada sin azúcar (así las hace la abuela, receta pastusa) o un pan Bimbo o Comapan.

    Las fotos